En Cayma, usted puede elegir si comer y beber en el cielo o el infierno. El resto bar Malak basa su carta de comidas y bebidas de acuerdo a la sensación de sabores que el cliente busca experimentar.
Hace ocho meses, cuatro jóvenes decidieron ingresar al mercado de los restaurantes con un diseño fuera de lo común en Arequipa. Los muebles, accesorios, música, bebidas y comidas se adecuan de acuerdo a lo celestial o infernal.
La idea se formó en una reunión entre los ingenieros Richard Gamio, Humberto Hurtado y Alexander Palmo.
Kristel Álvarez Gómez, administradora del establecimiento asegura que el diseño no está vinculado con el tema religioso. “Muchas veces hemos explicado ese punto. Una vez, dos adultos se retiraron antes de realizar su pedido porque pensaron que era un pecado. Y, no es así. La imagen por ejemplo no es un diablo, es una persona con alas”, comenta.
A la misma hora de hacer un pedido todos sonríen por los nombres curiosos de cada producto.
ZONA CELESTIAL. La carta de este lugar ofrece como bebida “Dulce Tentación”, un coctel machacado directo de mandarina, naranja, ron rubio, ron blanco, limón y soda. Asimismo, se encuentra “Puerta al cielo”, hecho de chirimoya, pisco, saborizados, Baylis, crema y nieve.
También puede encontrar nombres como “Ángel caído”, “Almohada celestial”, “Ponche de obispos”, “Santa escritura”, entre otros.
En cuanto a comidas en esta zona, Krisel recomienda a los comensales probar el “Cordero de Dios”. Un plato de carne de cordero con sabores a pachamanca, puré de camote, aromas cítricos y vegetales. O el “Lomaso del cielo”, o el “Bife de San Gabriel”.
ZONA INFERNAL. Este lugar es elegido principalmente por los jóvenes. Los nombres atrayentes invitan a probar tragos como “El Beso Diabólico”, elaborado a base de Absolut Blackberry, pisco, mango y jarabes. La decoración es una crusta con un beso. Y el “Malak Infernal”, bebida de jugo de mango, jarabe de sandía, vodka y pisco.
Bebidas como “Apocalíptico”, “Astaroth”, “Exorcismo”, “Serpiente Misteriosa”, además de los ingredientes que presentan diseños curiosos.
Al elegir y sentir los sabores infernales, la administradora recomienda probar el ‘Lechoncito de Iscariote’ y comenta que “es el plato bandera de nuestro local”.
En el restobar no solo hay comidas y bebidas temáticas, los piqueos también tienen su presentación en nombres como “Almohadas de querubín”, “Del ángel sus huevos”, “La última cena”, “Ostias del cielo”, “Tabla de lujuria”, “Panceta de don Sata”, entre otras que generalmente terminan en risas a la hora de pedir.
Son ocho trabajadores encargados de entregarles la sensación de sabores en el distrito de Cayma, en el local ubicado en Las Orquídeas 108.
Lea también: El arte y la creatividad en las tortas de gelatina