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Mientras dormía tranquilamente, rodeado de un centenar de féretros, un ligero ruido salido del interior de un cajón y lo interrumpió. Despertó contento esbozando una ligera sonrisa, porque supo que más tarde venderá ese ataúd.

Esta es una de las anécdotas de Juan Bustinza Bolaños, conocido cariñosamente por sus amigos y colegas como Drácula. Nació en Ilave en Puno, hace 66 años. En lleva trabajando casi medio siglo y hace más de 30 años, se dedica a maquillar y embalsamar (con formol) cadáveres. De niño comenzó trabajando como ayudante de carpintería, pero tras superar un accidente laboral a los 15 años, fue a trabajar en la antigua funeraria “Medina”, ubicada en el puente Bolognesi, en el Cercado.

Al principio, ¿en que consistía su trabajo ?

Primero trabajé sacando brillo a los cajones, después instalaba las capillas y luego cargaba los féretros, hasta que un día mi jefe me ofreció 10 soles por cambiar la ropa a un cadáver (mortaja). El primer cliente fue un señor de edad que murió por causa natural. Realicé la tarea con mucho temor, hasta que poco a poco me acostumbre.

¿Cómo decidió abrir su propia funeraria?

Por necesidad. Por los años setentas, tenía más gastos por mi esposa e hijos. Comencé este negocio con dos ataúdes en un local alquilado en la calle Beaterio, luego trabajé en la calle Octavio Muñoz Najar y hace 25 años trabajo frente a la avenida La Pampilla, donde he tenido buenos tiempos despachando hasta 5 cajones al día.

¿Desde cuándo se dedica a trabajar como maquillador de muertos?

Cuando tenía 30 años, algunos clientes ya me pedían maquillar y vestir a sus difuntos. Este es un trabajo normal y que realizo con respeto.

¿En qué consiste este trabajo?

El familiar me contrata por 100 soles para que yo mejore el rostro de su difunto. El trabajo me toma entre 45 minutos a una hora. Principalmente, maquilló a mujeres. Después de limpiar su rostro, utilizo varios cosméticos, como polvos, pinta labios y delineador; también los adorno con joyas y luego, si el cliente me lo pide, le pinto las uñas. Tiene que aparentar que solo duerme.

¿Que dificultades tiene?

Los fallecidos por accidentes de tránsito u homicidios son los más difíciles, observando una fotografía hay que darles forma, utilizando, en algunos casos, algodón.

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