María Quispe Flores (38) había planificado alumbrar a su bebé en el centro de salud de Zamácola (Cerro Colorado), pero las contracciones la sorprendieron la tarde de ayer y entró en labor de parto dentro de un patrullero de la comisaría de Ciudad de Dios.
Quispe contó que todo comenzó al promediar las 3 de la tarde en su vivienda ubicada en la asociación José Luis Bustamante y Rivero.
Su esposo, Héctor Paucar Salhua, intentó conseguir un taxi para trasladarla al establecimiento médico, pero al no hallar ninguno, optó por llamar la dependencia policial.
Los policías, Mario Cruz Quispe y Milton Pachacama García, se ofrecieron pero no contaban que el nacimiento del bebé los sorprendería en el trayecto.
Ambos optaron por estacionar el carro policial y ayudar a la mujer hasta que tenga a su hijo en brazos.
Luego, después de varios minutos, emprendieron nuevamente el trayecto hasta llegar al centro de salud donde la mujer y el pequeño de 3 kilos 500 permanecen estables.
Héctor Paucar Salhua, padre del pequeño, agradeció a los agentes por el apoyo y contó que pondrán por nombre al niño, Jensi Alberto.
"Jensi por un gran amigo que conocí hace unos años atrás y Alberto por mi papá", dijo emocionado Paucar.