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Nuevamente, la trayectoria del poeta arequipeño, Manuel Gallegos Sanz, fue recordada en una emotiva ceremonia, tal como se ha efectuado durante los últimos 26 años.

El parque que lleva su nombre fue escenario del evento donde los efectivos del Hospital de la Policía, así como los estudiantes del colegio Manuel Gallegos, colocaron las ofrendas florales en el busto del arequipeño por el Día del Poeta que se celebró ayer.

Gallegos Sanz escribió el himno de Cayma , resaltó la campiña y condenó el ocio y la guerra. Siempre exhortó a los pobladores a vivir de manera digna, fuerte y unidos.

“Aprendamos la ciencia del huerto que transforma el fruto la luz; condenamos el ocio y la guerra transmutando en bienes la cruz”, dice parte de la estrofa del himno.

El hombre, que nació un 5 de abril de 1896, fue maestro de profesión, historiador, político y periodista. Colaboró en diario Correo como columnista, pero también dirigió un diario llamado “La Provincia”, en la región Puno.

En noviembre de 1996 fue ingresado a la galería de Hombres Ilustres de Arequipa, en reconocimiento a su aporte intelectual en beneficio de la colectividad.

OBRAS. Gallegos escribió poemas dedicados a Cayma. Entre 1933 y 1934 publicó el verso Flechero Satírico, en 1965 Mundo del Agro, en 1968 Cantares Cholos y en 1969 la poesía Guitarra Melgariana.

También aportó con datos históricos a la cultura local, como fue el caso de Arequipa Monográfica, Folklore Arequipeño, Cuentos Populares y crónicas del Ande.

Escribió también “El drama de una vida”, que es una novela autobiográfica.

Su hijo, Ricardo Gallegos, dijo en la ceremonia que su padre “fue un hombre ejemplar, porque no solo se preocupó por su familia, sino en aportar a su ciudad, en dejar un legajo intelectual que sirva de inspiración para los futuros ciudadanos”.

El recordado escritor incursionó también en la composición de canciones como En el Día de la Madre, Himno del campo a la ciudad, Cantares de primavera, Canción obrera y Adiós a mi escuela.

Su dedicación a la educación fue tanta que también creó los himnos de los colegios Francisco Mostajo, Mariano Melgar, entre otros.

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