No les importó dejar en espera a los pobladores que acudían a sus instalaciones para realizar algún trámite, es más ni siquiera les comunicaron que no atenderían desde las 13:00 horas del último viernes y por ese día, para celebrar el Día de la Madre. Hablamos de los trabajadores de la UGEL Islay que hicieron un alto a su trabajo para divertirse.
El festejo por el Día de la Madre se habría convertido en el mejor pretexto para que los servidores de dicha entidad interrumpieran sus labores. La atención se suspendió en todas sus áreas como son Gestión Institucional, Gestión Pedagógica, Finanzas, Planificación y Administración.
En fotografías difundidas en redes sociales se aprecia claramente a los trabajadores reunidos en su local institucional, en la calle Iquitos, en el cercado de la ciudad de Mollendo, incluso compartieron cajas de cerveza y bailes.