Áncash: La ruta hacia el Huascarán
Áncash: La ruta hacia el Huascarán

En 1860, el italiano Antonio Raimondi realizó la primera expedición al Huascarán, ciento cincuenta y cinco años después, el interés por este nevado y sus rutas sigue vigente entre turistas e investigadores de todas las nacionalidades.

Llegamos a las 6:00 de la mañana a Huaraz, la capital de la región . Esta ciudad es llamada “Suiza peruana”, ubicada en la parte central del Callejón de Huaylas, a 3,050 metros sobre el nivel del mar.

De allí nos embarcamos hacia el Huascarán. Paisajes de ensueño La guía se llama Gina Romero y es de Caraz, provincia de Huaylas, donde preparan manjar blanco, tois y mazamorra de zapallo.

Ella nos enumera las “voladitas” o apelativos de cada lugar que vamos viendo mientras nos adentramos por los paisajes de la Cordillera Blanca, la cadena montañosa más alta y bella del mundo.

El río Santa riega el amplio valle. A nuestro paso lo acompaña la Cordillera Negra, de roca volcánica. En el fondo, el Callejón de Huaylas muestra su importancia histórica para sus pueblos, por sus indicios antiguos de la agricultura en América.

Visitamos “Recuay ladronera”. La versión popular señala que cuando Raimondi llegó, se enamoró de una recuayina, pero ella le ignoró todo el tiempo, por eso los lugareños se dicen ser “ladrones de corazones” y, por ende, el apelativo de “ladronera”.

Los recuainos se dedican a la agricultura y a la minería. El próximo paso es la ciudad de “Carhuaz borrachera”. Según la versión del pueblo, Raimondi pasó por aquí y encontró a su población embriagada, y presume que habían bebido chicha de jora.

Este lugar es famoso por los helados artesanales y por las aguas termales de Chancos (Marcará). “Este territorio cuenta con 340,000 hectáreas, habitan especies como el cóndor andino, el venado gris, el puma, la vizcacha, el añaz.

En flora destaca la puya, una de las plantas andinas más altas. Es importante seguir trabajando en la conservación del Parque Huascarán”, explicó a Andina, el coordinador regional del IM en Huaraz, Vidal Rondán Ramírez.

A las 4:00 de la tarde llegamos a la quebrada de Llanganuco, a 3,860 metros sobre el nivel del mar. Nos recibe el paisaje de ensueño: las lagunas Chinancocha o “laguna hembra”, y Orconcocha, “laguna macho”.

Las aguas del Chinancocha se caracterizan por su intenso color verde turquesa. Así sigue la ruta que nos llevará hacia el Huascarán, bordeando cerros, por caminos estrechos, maravillándonos.

Si se anima, vivirá un viaje para el cual es preciso llevar un buen abrigo, grata compañía y energía en el corazón.

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