Caso “Churre”: El legajo del servidor acusado

En Chimbote hay personajes que pasarán a la historia por sus méritos y sus hazañas, pero hay otros que deberían quedar olvidados. Humberto Venegas Liñán podría ser uno de ellos. Este trabajador estable de la Municipalidad Provincial del Santa es conocido no precisamente por su destacada labor, sino que ha hecho noticia recién por agredir salvajemente a una mujer, jefa del Taller Municipal y tratar de humillarla.

Pero ¿por qué no nos sorprende? Será porque Venegas Liñán, más conocido como “El Churre”, es el claro ejemplo que la impunidad existe y que la justicia también puede ser un bonito logo pegado en la pared.

Para que usted no se le olvide, el lunes último, la jefa del Taller Municipal, Moira Insignar Urdaneta, denunció que los hermanos Humberto y César Venegas Liñán, trabajadores del área de Vigilancia de la Municipalidad Provincial del Santa, la agredieron, porque ella se negó a que el “Churre” use ese recinto edilicio como su cochera.

“Humberto Venegas me golpeó la cabeza, con su hermano César quisieron sacarme arrastras de mi oficina, los trabajadores son testigos de la forma brutal como me golpearon, nadie se atrevió a defenderme porque saben la clase de personas que son estos hombres, mi secretaria tuvo que intervenir para parar la agresión”, indicó.

La misma alcaldesa Victoria Espinoza García acompañó a la funcionaria a la División Policial de Chimbote para denunciar la condenable agresión física por parte de los hermanos Venegas Liñán. Y además sentenció: “Humberto Venegas a quien ustedes conocen como Churre y su hermano (César) no seguirán más en el municipio, lo que han hecho es muy grave, linda ya con lo delincuencial”.

SU HISTORIA. Es así que Correo quiso conocer más de este personaje, y sabiendo que ha tenido problemas con la justicia, recurrimos al Poder Judicial, donde encontramos información de sus procesos. Hallamos que Humberto Venegas tuvo tres condenas judiciales.

La primera, del expediente 4518-1999, del Segundo Juzgado Penal Liquidador Transitorio, por el delito de receptación, en agravio de Juan Gervacio Carrasco y Eduardo Manrique Salvador y Beti Pumarica de Neyra. En este caso también fue condenado César Augusto Rodríguez Liñán, pero este por robo agravado. En enero de 2012, logró su rehabilitación.

En el expediente 778-2004, en el Primer Juzgado Liquidador Transitorio, Venegas Liñan se acogió al principio de oportunidad, reconociendo su responsabilidad del delito de apropiación ilícita en agravio de María Antonieta Salina Caballero. Además de haber pagado una reparación civil, en abril el 2012 se confirmó que se anule este antecedente. Esa fue la segunda.

La tercera condena, está en el expediente 099-2007 del Primer Juzgado Penal Liquidador Transitorio, en la cual lo hallaron responsable del delito de coacción en agravio de Eusebio Díaz Molina y Carlos García. En el 2008 lo sentenciaron, y en el 2012 logró su rehabilitación. Pagó una reparación civil de 600 soles.

MUCHA ACTIVIDAD. Pero Venegas Liñan, es conocido por los predios judiciales. El expediente 392-1981 señala que fue procesado por tráfico de drogas. Ojo solo procesado. Según el sistema informático del Poder Judicial indica que su estado es “en calificación”, pero eso ya desde mayo de 2011.

Hay otro caso, referido a la denuncia por presunta violación a la libertad sexual en agravio de Carmen Teresa Chávez Trujillo, que lo podemos ubicar en el expediente 1685-2005 del Segundo Juzgado Penal. En este caso quedó consentido el pedido de sobreseimiento que requirió el fiscal. Esto quedó archivado.

Otro caso que quedó archivado fue el proceso por presunta falsedad genérica en agravio del Estado por una denuncia del servidor Henry Sánchez Retamozo (expediente 1040-2006 del Quinto Juzgado Penal), el cual quedó archivado en el 2007, porque el Poder Judicial declaró no ha lugar a la apertura de instrucción.

También tuvo “buena suerte” en el proceso de expediente 1166-2006 por los presuntos delitos por coacción y abuso de autoridad, en agravio de Edgar Gallardo Benites y Francisco Abanto Izquierdo. Logró que se revocara la sentencia condenatoria en el 2008.

Otro proceso (expediente 1212-2006) que también se archivó por un pedido de sobreseimiento es el de presunto abuso de autoridad en agravio del Estado y de Edorita Paz Ninaquispe.

La racha de “buena suerte” lo acompañó también en el proceso (expediente 2123-2007 del Primer Juzgado Penal) por el presunto allanamiento ilegal de domicilio y hurto agravado, en el cual compartió el banquillo de acusados otra vez con César Rodríguez Liñan y Sanuel Robles Otiniano. El agraviado Marcelo Otiniano Vargas no logró que el Poder Judicial cambiará su decisión de abrir instrucción en mayo de 2009.

El caso que llenó de titulares los diarios en el 2007, fue el de presunto intento de homicidio contra el servidor municipal Henri Izquierdo Vásquez (expediente 046-2008 del Tercer Juzgado Penal Liquidador Transitorio). Aquí fueron procesados Venegas Liñan, Juan Bocanegra Irayta y Cirilo Mejía Ríos. ¿No imagina qué pasó? Sí, fue archivado.

EL ATAQUE. Pero este último caso se merece más detalles. Correo conversó con Izquierdo Vásquez, quien con lamentó recordar que la mañana del 11 de julio de 2007, salió de su casa en Nuevo Chimbote para ir a trabajar, pero a unos metros cuando pasaba el parque pasó algo que pudo haber terminado en tragedia.

“Veo que me esperaba un hombre, pero yo pasé por su costado nomás, le di la espalda y eché un disparo y me quedé quieto”, relató. Según su testimonio, se trataba del “Chino” Mejía quien le volvió a disparar tres veces más.

“Menos mal que solo un disparo me llegó a alcanzar; yo ya no pude hacer nada: caí”, contó. Según la investigación que la fiscalía tomó de oficio, Venegas -según refiere Izquierdo- habría sido el “autor intelectual” del ataque. Al final, en octubre de 2009 el proceso quedó archivado.

“Yo ya no accioné por falta de plata, como cristiano que soy no le tengo miedo, pero quien anda mal, mal termina”, reflexiona el servidor público.

EN LA COMUNA. Correo pudo acceder al legajo personal de Humberto Venegas Liñan, respecto a su comportamiento como servidor público, quien luego de haber sido jefe de la Policía Municipal fue “designado” como inspector del área de Vigilancia.

En noviembre de 1991 fue suspendido tres días por abandono de labores; en diciembre de 1995 suspendido por 2 días (imagínese esa sanción) otra vez “por agresión con instrumento punzante, atentando contra la libertad individual”. En ese mismo mes, otra vez fue suspendido por dos días por reincidencia de abandono de labores. Por la misma causal en marzo de 2005 fue amonestado.

En el 2007, la sanción fue mayor: suspensión de 30 días sin goce de haberes, por inconductas “infuncionales e indisciplinarias”. Y cerramos con sus deméritos en el 2008, pues fue sancionado con un cese temporal de 45 días por “reiterada indisciplina y falta de respeto contra el jefe de la Policía Municipal”.

¿CON LOS DÍAS CONTADOS?

En entrevista con nuestro Diario, el jefe de Recursos Humanos de la comuna provincial, Miguel Ángel Valderrama Ibañez, anunció que por requerimiento de la Comisión Permanente de Procesos Administrativos ayer remitió el informe de los testigos de la agresión contra la funcionaria Insignar Urdaneta. “Normalmente la agresión es causal de destitución, pero vamos a realizar el procedimiento de ley y respetaremos el derecho de defensa”, remarcó.

Dijo que según ley, la referida comisión tiene hasta 30 días para decidir el futuro de Venegas en la comuna. “Pero haremos lo posible para que sea sumario”, dijo. Eso sí, el funcionario indicó que se hará todo lo necesario para que la imagen de la municipalidad no se perjudique “para que no piensen que esto es tierra de nadie”.