Tras una visita de inspección que realizó una comitiva de autoridades cusqueñas al Parque Arqueológico de Sacsayhuamán, el subprefecto distrital de Cusco, Néstor Larico, dio cuenta sobre unas inscripciones hechas en un muro inca ubicado en el lado de Cruz Mocco.
En un inicio se pensó que el atentado al patrimonio era reciente, sin embargo, luego de una evaluación por parte de la Dirección de Cultura Cusco, se conoció que las inscripciones en forma de corazón habían sido hechas años atrás, y por la manera como las hicieron, perduran hasta la fecha.
“Las cicatrices del atentado al patrimonio de la humanidad suscitado en Sacsayhuamán quedan hasta el momento, estas personas inescrupulosas no miden el daño que ocasionan al patrimonio y hoy se puede decir que ese daño es irreparable, llamo a los visitantes a no causar ningún tipo de daño en lugares sagrados como este, y a permanecer siempre vigilantes a fin de proteger nuestro legado", señaló.
Por su parte el arqueólogo Francisco Solías, jefe del Parque Arqueológico de Sacsayhuamán, señaló a Correo que estas grafías recién se hacen visibles al público, ya que un nuevo circuito abierto en la zona, permite el paso de personas por el lugar, lo que antes estaba prohibido.
Refirió que el daño ocasionado al muro no es reciente y que se dio hace siete años atrás, pero debido al tipo de raspado que hicieron en la piedra, los especialistas no pueden borrarlo, y que quedó como testimonio de lo que malos visitantes pueden hace a zonas patrimonio de la humanidad.
“No hay forma cómo borrar esos grafitis, lamentablemente es un daño permanente. Felizmente ya se han contratado orientadores turísticos que a la par de ayudar en el retorno de los turistas, también hacen funciones como vigilantes del patrimonio, espero que ningún otro desadaptado intente dañar lo nuestro de esta manera”, acotó.
El 15 de octubre último, siete complejos arqueológicos de Cusco reabrieron sus puertas al turismo, en una primera instancia local, luego nacional y posteriormente internacional. El costo de las entradas es gratuito y busca reactivar el movimiento de visitantes, que representa gran parte de la economía local.