GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3
GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3

El único camino que conduce al Santuario Histórico de Machu Picchu es la carretera Hiram Bingham, una precaria vía de ocho kilómetros que transporta a los turistas nacionales y extranjeros desde la localidad de Aguas Calientes hasta la maravilla mundial.

Esta carretera atraviesa en su primer tramo el llamado 'Puente Ruinas', una plataforma que fue lanzada sobre el río Vilcanota hace más de 40 años y que se cae a pedazos frente a la mirada de propios y extraños.

Este puente, por cuya estructura atraviesan más de 100 vehículos a diario, ya tiene reemplazo, sin embargo el nuevo armazón -por increíble que parezca-, se halla botado a un lado de la vía, esperando la venia de las autoridades para que aprueben su instalación.

"Este puente no va a soportar mucho tiempo, son demasiados años los que tiene a cuestas, ya fue repotenciado con cables de acero y aún así se balancea de forma más que peligrosa cada vez que pasa una unidad", citó el ingeniero César Turner, jefe de Gestión de Riesgos y Desastres de Machu Picchu.

El funcionario también mencionó que el nuevo puente tipo acrow no se lanza debido a que el Ministerio del Ambiente pone 'trabas' para su instalación. "El Ministerio del Ambiente ha realizado observaciones técnicas incompatibles con nuestro nuevo puente, de ellos depende levantar estar observaciones y dejar que la obra empiece en beneficio de la población y los turistas",

El nuevo puente mide 42 metros de largo por siete de ancho, está conformado por vigas y travesaños de acero con remaches de fijación del mismo material.