Los tambores de guerra vuelven a sonar en el Corredor Minero del Sur. En un año más que conflictivo y lleno de reclamos por parte de pobladores de Apurímac y Cusco, moradores de esta última región anunciaron una nueva huelga indefinida y bloqueo de la vía nacional, esta vez en cinco puntos de la provincia de Espinar, donde protestan contra la minera Glencore Antapaccay.

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Recientemente pobladores de los distritos de Pallpata, Pichigua, Alto Pichigua, Ocoruro y Condoroma enviaron un oficio a la Prefectura y Subprefectura de Cusco, solicitando garantías de orden público, a mérito de la huelga indefinida y bloqueo de pistas que desarrollarán a partir de la media noche del próximo miércoles 20 de abril.

En el documento se lee que, después de una asamblea general, desarrollada en el distrito de Pichigua, tomaron la decisión de manifestarse contra la minera Glencore Antapaccay y contra el Estado, acusando a estos entes de no solucionar sus demandas y pedidos.

En conversación con Correo, Freddy Llaique, presidente del Frente de Defensa de los Intereses de Espinar, confirmó que la protesta iniciará con el bloqueo del Corredor Minero del Sur por parte de piquetes de manifestantes, que impedirán el paso de todo vehículo de transporte de minerales, equipo, logística y personal de los proyectos circundantes.

“Ante los oídos sordos del Gobierno y de la Minera Glencore Antapaccay, mediante asamblea multisectorial descentralizada confirmamos el reinicio de la huelga indefinida este 20 de abril, el principal motivo es ser considerados área de influencia directa del futuro proyecto minero Integración Coroccohuayco en Espinar”, señaló.

El dirigente afirmó que en esta ocasión no dejarán circular ningún vehículo de ninguna empresa minera que opera en la zona, vale decir, además de Antapaccay se verían perjudicados Las Bambas y Hudbay.

Acerca de la reciente reunión en Lima, entre los alcaldes de Pallpata y de la provincia de Espinar junto al premier de la República, donde acordaron reinstalar una mesa de diálogo este 29 de abril, el dirigente espinarense señaló que desconocen este acuerdo ya que no hubo convocatoria para los representantes comunales ni dirigentes campesinos.

Finalmente acotó que sus asentamientos se hallan a cuatro kilómetros de los dos tajos del proyecto minero Integración Coroccohuayco, asegurando que fueron excluidos del estudio de impacto ambiental realizado en el sector, donde se considera área de influencia ambiental directa a 13 comunidades menos las 05 que ahora están en protesta.