Tomógrafo malogrado hace varios meses deja a pacientes en la calle

El director de Essalud Abancay, José Altamirano, confirmó que el tomógrafo de 16 cortes, el único equipo de estas características que además de sus asegurados, atiende a los pacientes de los hospitales del Minsa en Apurímac se encuentra inoperativo desde hace tres meses.

Indicó que la demora en su reparación se debe porque había dificultades para encontrar el repuesto que era vendido por un solo proveedor de la ciudad de Lima, razón por la cual, se presentaron demoras en el proceso logístico.

Según Altamirano Rojas, existen serias deficiencias con el tomógrafo desde el momento que fue adquirido porque ya son varias las veces que ha presentado desperfectos, sugiriendo que debe efectuarse su reposición, aunque será un trámite engorroso en vista que fue adquirido a través del PNUD en gestiones pasadas.

Dejó entrever que no solo había problemas con este equipo (tomógrafo) que atiende a los pacientes derivados de los hospitales públicos, sino también, en el equipo de mamografía, ventiladores mecánicos y hasta con los dos ascensores, también inoperativos y licitados por el PNUD cuyas garantías no se están cumpliendo.

Cabe precisar, el hospital Abancay II de Essalud nunca fue inaugurado formalmente – solo hubo una ceremonia de entrega- y hasta la fecha siguen vigentes 60 observaciones que la contratista no ha levantado por un monto que supera los 2 millones de soles.

La clínica particular Santa Teresita que pertenece a la Diócesis de Abancay, tiene un tomógrafo más moderno, donde actualmente los pacientes del seguro social, así como los referenciados del hospital regional de Abancay son atendidos. Se estima que el examen de tomografía oscila entre 300 y 400 soles.

No se ha podido determinar el número de personas que diariamente acuden a este servicio y cuyo costo es asumido por el seguro y el SIS, además de particulares.

Aquí viene lo preocupante. El jefe de Radiología del hospital de Essalud quien tiene a su cargo el manejo del tomógrafo de la institución, es el médico José Fernández.

Este mismo galeno es propietario en sociedad con otros colegas de un similar equipo (incluso con más cortes) que funciona en la clínica Santa Teresita y que mediante convenio fue instalado en dicho local, inversión que lógicamente debe ser recuperada precisamente teniendo como pacientes a los que requieren de un examen de tomografía.

“…no puedo adelantar juicios. Si habría algo ilícito en esta situación debería haber alguna denuncia

al respecto. No puedo precisar si hay intencionalidad detrás de todo esto”, señaló Altamirano Rojas.