Tres comuneros mueren baleados tras fuerte enfrentamiento por tierras en Cotabambas (VIDEO)

Una antigua rivalidad por tierras terminó con el saldo de tres personas fallecidas y varias heridas, luego de un enfrentamiento campal entre comuneros de Occajahua y Chaccaro en la localidad de Tambobamba, perteneciente a la provincia de Cotabambas en la región .

La pelea inició la mañana del último jueves y se desarrolló durante todo el día, según reportes oficiales, más de mil pobladores pertenecientes a ambas comunidades chocaron armados con escopetas, palos y piedras, al final de la disputa Sabino Huillca (32), Nicolás Huillca (22) y Ajelandro Muñoz (45), murieron víctimas de impactos de proyectiles.

El enfrentamiento se originó debido a que pobladores de Occajahua iniciaron trabajos de minería artesanal en el límite de ambas comunidades, hecho que había sido prohibido por acuerdo mutuo entre los habitantes, quienes habían firmado un pacto de trabajo conjunto y no agresión, que implicaba que ninguna de las poblaciones podía realizar labores agrícolas ni de extracción mientras no se coloquen los hitos de orden.

Habitantes de la zona acusaron una nula presencia de autoridades en el área y escasa asistencia de policías, al momento más álgido de la pelea, sólo dos agentes del orden intentaron disuadir de la agresión a los cientos de comuneros, una vivienda también resultó incendiada.

Se supo que las labores de investigación y levantamiento de cadáveres recién iniciarán el viernes por la mañana, cuando representantes del Ministerio Público y la Fiscalía viajen hasta el sector del conflicto, ubicado aproximadamente a 3 300 metros sobre el nivel del mar.

UN PROBLEMA DE NUNCA ACABAR.

Entre las comunidades campesinas de Occajahua y Chaccaro existe una zona en litigio de 630 hectáreas, la misma que según la cartografía, aparece superpuesta y de pertenencia a ambos asentamientos, es por ello que la disputa es constante y ha generado conflictos desde hace muchos años atrás.

En comunicación con Correo, el alcalde de Tambobamba, Rildo Guillén, citó que su comuna no puede hacer nada por el tema de los linderos comunales, ya que esta responsabilidad cae enteramente sobre la Subgerencia de Saneamiento Físico Legal de la Propíedad Rural (Forprap) del Gobierno Regional de Apurímac.

"Supimos que hay tres muertos por impacto de perdigones de escopeta, lamentablemente los municipios no ven el problema de límites, todo lo ve el Gore, pero por falta de acuerdo el tema quedó en nada", señaló.

En un informe alcanzado por el Forprap, presentado el último viernes a raíz de la pelea, se señala que se trabaja en el asunto de linderos a partir de julio del 2019, junto con representantes de ambas comunidades, la Defensoría del Pueblo e incluso la Iglesia, quedando en que las comunidades debían emitir un pronunciamiento previa consulta a su población acerca del área de superposición, a fin de concluir el tema y colocar los hitos, este pronunciamiento no se ha dado a la fecha.

Momentos antes de emitir su informe ante el pleno del Consejo Regional de Apurímac, el subgerente de Forprap, Waldir Pimentel, señaló a Correo que desconoce por qué no se trabajó en este tema antes del 2019, sabiendo que el problema data de hace decenas de años, también mencionó que su despacho no puede crear nuevos linderos o rehacer los planos.

"Nosotros estamos presentes a solicitud de parte, aquí la única solución es el diálogo o apelar a una sentencia vía judicial, todo se debe a un error cartográfico de superposición, que todavía viene del Minagri", sentenció.

Por su parte el subprefecto provincial de Cotabambas, Walter Contreras, hizo un llamado a las autoridades para agilizar los trámites de saneamiento de estos terrenos, denunciando a su vez la falta de interés y diligencia para con el problema, se aunó a los pobladores, quienes citaron que denunciaron la acometida mucho antes de que pasara, sien embargo las fuerzas del orden no llegaron a tiempo.

DATO:

-Apurímac presenta 15 casos de conflictos de territorialidad hasta el momento, ubicándose tercero a nivel nacional, después de Áncash con 17 casos y Cusco con 16.