Tal y como lo había anunciado, el gerente de la Contraloría, Vladimiro Vegas, tomó cartas en el tema del Estadio IPD de Santa Ana.

Es así que con un equipo de auditores llegó hasta el recinto deportivo más importante de la ciudad a fin de realizar una inspección, en la cual encontraron posibles riesgos que ponen en entredicho el uso del estadio en un nuevo partido de la Copa Perú. La obra está entre el 85 y 87%.

RIESGO. Durante el recorrido se pudo observar baños sin puertas, material de construcción (por doquier), el cemento mal apilado, labores de pintado, tarrajeo, entre otros.
“Lo más preocupante es el riesgo que se corrió al desarrollar un evento de esta magnitud. Manifiesta el supervisor y el residente es que se dejaron llevar por la presión política, pero ellos son los responsables de esta infraestructura. Recomendamos a las autoridades hacer entregas parciales de la obra, sustentadas técnicamente y con las pruebas correspondientes”, dijo Vegas Palomino.

Entre los principales riesgos que encontró Contraloría, está que la iluminación sigue inconclusa, cables expuestos que son alto riesgo y ni siquiera hay espacio para que entre una ambulancia al recinto.
Hallaron piedras, ladrillos, fierros y material de construcción a la mano del público, que podría usarlo en caso de que haya un enfrentamiento dentro del estadio, como ya pasó en partidos de Copa Perú.

La memoria guarda que en el último partido de Copa Perú 2011, del Municipal de Paucará acabó en batalla campal con bombas lacrimógenas.

Falta construir un cerco perimétrico, a metros de la línea hay buzones que son un peligro para los futbolistas.

La administración del Estadio está a cargo del Gobierno Regional, por lo que no se sabe cuánto ganaron por su uso.

Juan Valcarcel, residente de la obra, afirmó que los riesgos siempre habrán, pero que se reducirán.
“Debemos minimizar riesgos, eso compete a los organizadores, la violencia puede pasar en cualquier estadio y se debe prever con PNP, serenazgo y otros. La población debe tener cultura cívica”, afirmó Valcarcel, quien añadió que hasta ahora no tuvieron problemas.