Fajas de Viques: conocimiento aplicado en su elaboración se convierte en patrimonio
Fajas de Viques: conocimiento aplicado en su elaboración se convierte en patrimonio

Nos topamos con ella cuando dejó por unos instantes su pellejo de oveja en el que suele sentarse a tejer para ir a la municipalidad de Viques, llevaba en sus manos el fruto de su labor de 6 días, una faja multicolor finamente tejida, un pedido que le hicieron para entregarlo a un alto funcionario del Estado.

Ella, María Huzco Toribio, es una de las pioneras en la elaboración de fajas andinas (aklla o challpi wathrako), en Viques y el anexo La Breña .

La faja es una prenda altamente valorada como expresión del arte popular peruano por estudiosos, coleccionistas e instituciones de todo el mundo, cuyas técnicas de elaboración fueron reconocidas por el Ministerio de Cultura como Patrimonio Cultural de la Nación.

Cada mañana desde hace más de 42 años, sus dedos juntan una hebra con otra, matizan colores y tejen coloridas fajas, María aprendió este oficio de su abuela y su madre.

Como no tiene hijas dedica a compartir sus conocimientos con sus vecinos y turistas. Los motivos que plasma en sus fajas multicolores son variopintos, destacan el “Tren macho”, elefantes, danzantes, aviones, helicópteros, buques, flores, picaflores y carros. Su trabajo lo sabe de memoria tanto que teje casi sin ver los que hace.

Doña María ha sido tentada por extranjeros para exponer y enseñar su trabajo a nivel internacional, pero ella ha preferido quedarse por sus hijos.

En cada wathrako pone su alma, su creatividad, primero tuerce el hilo, luego lo urde (técnica de tejido), luego illawar (alternar los hilos para tejer) y luego se teje.

VENTA. Otro artesano Dionisio Quispe, del sector La Breña, nos comenta que el trabajo es duro para hacer una faja pero lo peor es la poca paga. El costo de cada una depende de la calidad de la misma.

La primera como la denominan cuesta 160 soles, en ella el artesano tuerce más el hilo, las figuras que dibuja al tejer son más complicadas.

La segunda puede costar entre 100 y 120 soles, mientras que la tercera cuesta 40 soles en el mercado local.

El artesano asegura que las fechas de carnavales y santiago hay mayor demanda de fajas, el resto del año los pedidos bajan, por eso los cerca de 20 artesanos que hay en el sector de La Breña, venden sus productos de manera minorista.

La vigencia de esta faja tejida en telar de cintura es expresión de una cultura que se mantiene vigente en la medida que no ha permanecido congelada en el tiempo, sino que ha incorporado elementos de cambio y recrea las imágenes que van a representar la identidad wanka.

El reconocimiento busca revitalizar dicha actividad textil, instando a la organización de concursos zonales que estimulen la competencia entre las tejedoras.

HISTORIA. José María Arguedas, ilustre escritor, antropólogo y etnólogo, investigó la especialización de fajas en Viques y concluyó que podría devenir de hace varios siglos, con lo que nos hace presumir que podría remontarse a tiempos del Tahuantinsuyo, época en que muchos ayllus se especializaron en determinados productos como tributos para el inca.