Escrito por Wilder Huaroc 

En medio de una pandemia a la que se le combate a punta de agua, jabón y lejía, la labor de las trabajadoras de limpieza se convierte en algo casi heroico.

Para que sus hijos tengan comida, abrigo, educación y salud, muchas mujeres asumen grandes luchas de noche y madrugada. Ayer, a pocos días de celebrarse el “Día de la Madre”, 60 heroínas recibieron una sorpresa.

TRABAJO. El técnico PNP Orlando Espinoza Canales, de la Unidad de Tránsito, las esperó al término de su labor en la puerta donde guardan sus carritos.

No solo les llevó rosas, refrigerio, sino también les entregó canastas. Allí estaba, Elena Véliz M. (39). “Trabajo hace diez años, esta labor es bien dura, porque la gente bota la basura a la calle. Tengo miedo al covid, tengo tres hijos”, nos dice; mientras que Vicenta C. quien tiene 5 hijos, sonríe feliz pidiendo a Dios que cuide al bondadoso policía que hace 25 años perdió a su madre Enma Canales.

ALEGRÍA. Agasajo se desarrolló con las debidas medidas de seguridad, en la intersección de las calles Alcides Carrión y Piura Antigua.