Ante la inacción de las autoridades del distrito de Apata, en Jauja, un grupo de pobladores del centro poblado de Nueva Esperanza decidió unirse para canalizar el principal afluente de la zona, con el objetivo de prevenir desastres naturales ante la inminente temporada de lluvias que se avecina.
Ricardo Pecho y Lázaro Espinoza lideran esta iniciativa impulsados por la necesidad de proteger a las familias y los terrenos de cultivo. Con sus propios peculios lograron alquilar maquinaria pesada para acelerar los trabajos de encausamiento, mientas que sus vecinos colaboran con mano de obra voluntaria.
“Estamos limpiando y canalizando el río por iniciativa propia porque en años anteriores sufrimos los estragos de la naturaleza y muchos quedaron damnificados al esperar la intervención de la maquinaria del municipio”, explica Pecho
Enfatizó la importancia de actuar de manera preventiva para salvaguardar la vida y los bienes de la comunidad. “Este esfuerzo colectivo refleja la determinación de los pobladores por garantizar la seguridad de sus hogares frente a la inminente amenaza de desastres”, afirmó.
Ambos comuneros expresaron su frustración ante la falta de apoyo gubernamental y hacen un llamado a la unión, convencidos de que su trabajo se replique en otras zonas que están expuestas a los desastres naturales.