Luego del dispositivo dado por la municipalidad de Huancayo, que solo se harán compras al por mayor en los mercados centrales del damero capitalino, ayer, en franca contradicción a esta medida, desde las 4 de la madrugada hasta las 11:30 de la mañana, cientos de comerciantes, se posesionaron de siete cuadras de la avenida José Olaya y calles aledañas, para vender una serie de productos especialmente de pan llevar.
También algunas cuadras de los jirones Huánuco e Ica fueron ocupadas por los informales.
Toda la mañana de ayer se observó bullicio infernal, caos, comercio indiscriminado y suciedad, generando un potencial caldo de cultivo para la diseminación de enfermedades, entre ellas el covid.
LOS DISPERSAN. Felizmente, a partir de las 11:30 de la mañana, la intervención de la policía hizo que toda esa muchedumbre de comerciantes y compradores se dispersaran por diferentes lugares; sin embargo los cúmulos de basura en la vía pública eran la evidencia de prácticas irresponsables.
El problema en esta parte de la ciudad se debe a que las puertas de mercados como el “Maltería” y el Ráez Patiño estuvieron cerradas para la compra individual. Y es que, los únicos autorizados para comprar aquí son los dueños de minimarkets, bodegas u otros análogos, con el fin de descentralizar las ventas y evitar reuniones.