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Para evitar la propagación del coronavirus, los cuerpos de las víctimas de esta enfermedad deben ser incinerados, sin la presencia de familiares. Sin embargo, la región Junín solo cuenta con el crematorio del Cementerio General de Huancayo, para cumplir esta labor.
Asimismo, manifestó que el costo de esta acción es de cuatro mil soles. “Tenemos que tener en cuenta que el equipo necesita un mantenimiento cada seis meses, para evitar que se malogre, y así quedarnos sin un lugar donde incinerar a las víctimas de este virus”, dijo.
José Marzano detalló que el proceso de cremación dura aproximadamente una hora. “Los hospitales deben traer los cuerpos debidamente preparados, al interior de bolsas y con las soluciones necesarias para evitar el contagio del personal que se encarga del proceso”, dijo.
Una vez terminada la cremación, los trabajadores pasan un proceso de desinfección y sus indumentarias también son desechadas en el fuego. “Luego fumigamos el área, para poder inician nuevamente el proceso”, dijo. Añadió que a la fecha se han realizado dos incineraciones.
Luego las cenizas son entregadas a los deudos, que así lo soliciten, los cuales tendrán acceso a las mismas sólo las 24 horas posteriores a la cremación. Por su parte el director regional de Salud, Henry Olivera, indicó que el manejo para fallecidos por coronavirus, se encuentra establecido por el Ministerio de Salud, que establece que el cadáver no debe permanecer más de 24 horas en el mortuorio del establecimiento de salud, en una vivienda o lugar distinto. Además, debe ser cremado o enterrado máximo en 24 horas desde el momento de la certificación de su deceso. El transporte del cadáver fuera de la jurisdicción dónde falleció, está prohibido.
El personal de salud encargado de manejar los cadáveres debe usar los equipos de protección personal, el cuerpo debe ser colocado en una bolsa impermeable resistente y de cierre hermético.
La bolsa que contiene el cadáver debe ser rociada con hipoclorito de sodio e inmediatamente colocada en el ataúd, que deberá ser sellado y no abrirse por ninguna circunstancia.
El funcionario agregó que posteriormente, será cremado en lugares donde se cuente con un incinerador cercano, mientras que en lugares donde no exista crematorio se procederá al entierro.
