El diferendo limítrofe entre Chincha (Ica) y Cañete (Lima) retorno a la agenda política. El miércoles se reunieron autoridades regionales, municipales, policiales, legislativo y otras con el propósito de sumar esfuerzo en la defensa del territorio chinchano. La posición que se mantiene por historia, geografía y legalmente es la margen izquierda del río Cañete como punto de delimitación.
Problemática
En el encuentro se plantearon problemáticas que todavía no están resueltas y que demandan ser atendidas por las instituciones iqueñas. Es el caso del dominio que ha ganado Cañete en las Pampas Melchorita. Policialmente, los hechos delictivos que ocurren en sectores como Nuevo Ayacucho son atendidos por la comisaría cañetana y no en su totalidad por la delegación del distrito de Grocio Prado.
La misma situación se presenta con el Ministerio Público. Los procesos por denuncias diversas son llevados por la sede fiscal de Cañete y no por Chincha. Sin dejar de mencionar la intromisión que en la víspera tuvieron representantes de la ciudad vecina en la ejecución de una obra con presupuesto grociopradino. Los trabajos, forzadamente, se suspendieron hasta que pueda encontrarse la solución.
En el sector Salud también se pretende ganar espacio a favor de los cañetanos. Según se informó, se piensa destinar fondos del Estado para construir un centro de salud que será adscrito a la red de Cañete. Al respecto en los siguientes días se sostendrá una reunión entre funcionarios de la Diresa Ica y el Ejecutivo a fin de alertar sobre esta maniobra, ya que, en la zona funciona un establecimiento de salud de la Ejecutora 401-Salud Chincha.
Reunión
Las autoridades presentes en esta reunión Jorge Hurtado (gobernador de Ica), y los alcaldes César Carranza (Chincha), Hugo Pachas (Grocio Prado), Raúl Vilcamiza (Chavín), así como los congresistas José Elías y Raúl Huamán, y otras autoridades, se comprometieron en defender las tierras chinchanas. Se ha sugerido la designación de un alcalde delegado en Nuevo Ayacucho para ir recuperando presencia en la Pampa Melchorita.
El problema limítrofe lleva varias décadas y en este nuevo siglo, se mantienen las diferencias y no hay interés de las regiones de Lima e Ica por encontrar una solución.