La educación en la región Ica es un tema aún pendiente y uno de sus puntos débiles es el que se refiere a la interrupción escolar, también conocida como deserción escolar. El acceso a la educación ha sido casi imposible para algunos ya que en el año 2020 se presentó una tasa de deserción escolar por la pandemia del COVID-19, hasta de 12 mil estudiantes sin acceso a la educación. ¿Qué dicen los estudiantes de Ica y representantes del sector Educación sobre las dificultades y desafíos que enfrentan los escolares, que llevan más de 18 meses sin clases presenciales?, diario Correo conversó con algunos de ellos.
Menores son los más vulnerables
La Tierra Prometida es una zona de la provincia de Ica que ha sido fundada por familias de condición humilde y la mayoría migrantes de las regiones de Ayacucho, Huancayo y Huancavelica, que encontraron allí la oportunidad del hogar propio, logrando conquistar las partes más altas de los cerros. Ahí se evidencian mayores dificultades para acceder a la educación, por la falta de electricidad, conectividad y equipos tecnológicos.
En un recorrido por la Asociación de vivienda Juanita, evidenciamos a Sarita, una niña de 9 años que repasaba su cuaderno del 2019, ya que actualmente no cuenta con ningún aparato tecnológico con el que pueda acceder a las clases virtuales y llegar a una nivelación en sus estudios. “En matemáticas solo se sumar, pero no los números muy grandes como diez o veinte, eso si no sé”, dice la niña. Su madre Rosana Picharde, dijo que no puede conectarse a las clases remotas porque su celular se malogró desde el último 16 de junio del 2021, repararlo le cuesta 140 soles, lo mismo que significa hasta una semana completa de alimentación para ellas.
Asimismo, en la I etapa La Molina de La Tierra Prometida vive la señora Deisy Alcca Palomino en una casa de madera sin agua, ni desagüe, sin computadora, ni laptop ni tablet. Solo un viejo televisor, por lo que envía diariamente a su hijo Jeimmy de 13 años, quien cursa el primer año de secundaria hasta el sector de pueblo joven Señor de Luren, donde reside un familiar, quien le presta su teléfono para que acceda a las clases por medio del WhatsApp y en algunos casos vía Zoom. “Aquí las autoridades no han brindado tablet ni celular para los niños, absolutamente nada, salimos adelante solos y con lo poco que tenemos, me preocupa porque debo enviar a mi hijito en un micro hasta otra zona, pero es la única manera en que pueda acceder a sus clases”, lamentó indicando que son décadas que su zona ha sido olvidada y no se ha concretado solución alguna por parte de las autoridades locales y regionales, para poder enfrentar la interrupción escolar que se presenta en decenas de menores del lugar.
El mismo panorama se presenta en el A. H. 2 de Mayo (Subtanjalla), donde 55 alumnos aún presentan dificultades para acceder a sus clases virtuales porque no cuentan con energía eléctrica en sus viviendas, Nilson Souza Acho, exdirigente de la junta vecinal, precisó que el sistema escolar es precario y deben pagar diariamente hasta 5 soles por persona para cargar sus celulares para que sus hijos puedan acceder a las clases y mantener una comunicación con sus docentes.
La dificultad es compartida. Plácida Rojas, quien solo estudió primaria, tiene un niño de 11 años al que no sabe cómo enseñarle sus cursos, pero mantiene la esperanza de que su hijo sea mejor que ella. Los menores batallan por aprender lo mejor a través de la virtualidad.
Estadísticas de la deserción escolar
Según cifras de la Dirección Regional de Educación (DRE) en Ica, se calcula que unos 3 mil estudiantes a nivel regional aún presentan interrupción escolar en el año 2021, afectando en mayor medida a alumnos de zonas rurales. Además, las cifras de estudiantes que aún no han sido matriculados este año es de 2536, quienes pueden perder el año escolar.
“Tenemos más problemas en los lugares más alejados, donde no existe conectividad, no tienen electricidad. En las zonas urbano marginal también es muy latente el problema económico, pueden tener equipo celular, pero no tienen el paquete de internet, empezamos con alrededor de 9 mil alumnos que no reportaban asistencia, a la fecha aún tenemos 3 mil, de un total de 185 mil alumnos”, declaró el director regional de Educación de Ica, Carlos Medina Siguas.
La autoridad educativa regional detalló que como medidas de acción para reforzar la modalidad a distancia, el sector Educación dispuso la entrega de 5266 tablets escolares y 6303 chips de internet ilimitados y la implementación de 21 antenas de radio y televisión.
Colegios habilitados para el regreso a clases semipresenciales
En tanto el aplicativo del Sistema de Seguimiento y Alerta para el Retorno Seguro (SARES) del Ministerio de Educación registra 1382 servicios educativos habilitados en el departamento, que pueden albergar miles de alumnos para el retorno a las clases semipresenciales. Sin embargo, el volver a las aulas no es obligatorio.
Frente a ello, Carlos Medina indicó que es decisión conjunta de los gobiernos locales, padres de familia y docentes, el aprobar el retorno a las aulas.
“El retorno debe ser seguro, flexible, gradual y voluntario. La plataforma indica que el colegio cuenta con las condiciones epidemiológicas para las clases semipresenciales, se toma en cuenta la tasa de mortalidad, índices de contagios, disponibilidad de camas UCI, se hace un reporte y emite un informe de las escuelas posibles que puedan aperturar. Luego la UGEL provincial debe disponer las condiciones de salubridad y bioseguridad, es decir, dotación de mascarillas, protector facial, kit básico de higiene y finalmente existe la condición social. Depende del padre de familia si envía o no a su hijo a la escuela. Se apertura a través de un acta, pero si aparece un caso positivo del COVID-19, se suspende inmediatamente las clases”, sostuvo.
Argumentó que bajo esa perspectiva se aperturaron 16 escuelas en toda la región Ica, de las cuales 14 se encuentran ubicadas en zonas rurales; son unidocentes, multigrados, y mantienen un aforo menor a los 10 estudiantes. Además de dos escuelas ubicadas en zonas urbanas de Palpa y Nasca.
Precisó además que de un total de 19,929 trabajadores del sector Educación (docentes, administrativos y auxiliares), que residen en la región de Ica, más de 15 mil ya han sido inoculados con la doble dosis contra el mortal virus. En tanto, aún existe una brecha de 4060 servidores educativos que recibirán el antídoto en el transcurso de la semana.
Posición del Sutep regional
Por su parte Víctor Morales, secretario regional del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (SUTEP), indicó que para los maestros ha significado un reto adecuarse a la tecnología para el dictado de las clases, además enfatizó en que se deben tomar acciones inmediatas en cuanto a los ambientes escolares, aumentando la inversión en salubridad y mayor tecnología en el sector Educación.
“Si se vuelve a la presencialidad, los salones deben adecuarse, se deben contratar más auxiliares y docentes. Solo al año 2020, las estadísticas decían que más del 60 % de los profesores no tenían conocimiento amplio del uso de la digitalización, es importante capacitar”, finalizó.