El alcalde distrital de Santiago, César Salazar Carpio, le entregó la “Medalla de la Ciudad” a Rufila Ipurri Arotinco, la ciudadana más longeva del distrito al tener 111 años de edad.
Nació en su natal Cayara (Ayacucho) en 1905 y a los 12 años llegó a trabajar junto a sus padres en la hacienda de Don Domingo Elías. Casada con Agapito Oré Palomino, tuvo ocho hijos. Tiene 22 nietos, 15 bisnietos y 10 tataranietos.
El secreto de su vida para superar el siglo de vida sin problemas de salud es dormir y comer bien en sus horas, y no preocuparse porque todo en la vida tiene solución.
Además de la distinción, recibió una canasta de víveres.
La centenaria mujer dice que la preocupación es mala y que genera problemas de salud. Recomienda evitar el estrés.