Policía es implicado en hurto al lado de la Región Policial

Un giro total dieron las investigaciones por hurto de productos valorizados en 30 mil soles, ocurrido el primer día de setiembre en la avenida J. J. Elías, al costado de la Región Policial.

En menos de un mes, la fiscalía archivó el caso. Sin embargo, el 10 de octubre en horas de la mañana, agentes de la Depincri, alertados por los agraviados, intervienen a Irma Fabiola Acevedo Tataje (25), quien terminaba de vender a un cliente cigarros electrónicos atomizador a 400 soles, el mismo que había sido hurtado junto a otras pertenencias en el local restaurante “Pa’ comer pa’ llevar”.

Fabiola Acevedo Tataje, que también era trabajadora del lugar, inicialmente había denunciado el delito de hurto, pero luego fue intervenida por la policía al encontrarle vendiendo algunos de los productos robados. Minutos después, llegó el SO2 PNP Miguel Ángel Martínez Cuellas, quien dijo ser su cuñado e intentó obstaculizar la labor policial. Lanzó adjetivos e insultos hacia sus propios colegas que intervenían a su cuñada, a quien además le aconsejaba negarse y no firmar las actas, refiriendo que le habrían sembrado los objetos. Esto quedó registrado en un acta policial.

Desde que sucedió la intervención hecho, la agraviada, la norteamericana Kassey Lynn, dijo que es amenazada de muerte por el policía SO2 PNP Miguel Martínez Cuellas, por lo que ayer acudió a solicitar garantías para su vida.

El acusado, policía en actividad, que actualmente labora en la comisaría de Pachacútec, quien a su salida, no respondió sobre las acusaciones.

Quien sí habló fue la empresaria norteamericana por intermedio de su traductor Willian Shozo Shcratsuchi.

Dijo que existió complicidad entre el policía, su cuñada y su esposa Cynthia Marilyn Acevedo Tataje, quienes habrían sido los autores del robo. Exige a la fiscalía reabrir el caso y ordenar la detención preliminar de los acusados.

Por su parte, el policía acusado, en su declaración ante sus colegas, aseveró que los autores serían una trabajadora y otros ‘robacasas’. Esta situación aún no ha sido confirmada.

Trascendió que el comprador era seguido por la policía, quienes intervinieron cuando se realizó la venta de los productos antes robados.