La Contraloría General de la República detectó irregularidades en la compra de 10 camionetas, motos lineales y cuatrimotos para el servicio de serenazgo que hizo la Municipalidad Provincial de Ica. Existe un perjuicio económico de 144 mil 700 soles.
Según el documento al que accedió Correo, la responsabilidad penal alcanza al alcalde provincial, Carlos Ramos Loayza, y los funcionarios Gustavo Enrique Ponce Farfán (presidente del comité especial), José Luis Escobedo Calderón, José Felipe Tipacti Torres y María Adelma Tenorio de Campos.
Entre las irregularidades detectadas está que el alcalde recepcionó las tarjetas de propiedad y placas de rodaje con 192 días de retraso y la Municipalidad Provincial no aplicó ninguna penalidad por la demora. El próximo viernes, a las 5:00 de la tarde, el informe de la Contraloría será debatido en sesión extraordinaria.
El regidor provincial Mario Bonifaz Hernández aseguró que será importante el acuerdo de dicha sesión, donde se pedirá a la Procuraduría Pública formular la denuncia penal contra los implicados en la irregularidad.
El informe señala, además, que hubo favoritismo en el proceso de licitación para que la empresa recién creada y sin experiencia en el rubro Maquinarias y Equipamiento del Perú SAC se adjudicara la compra. El regidor César Magallanes, tiempo atrás, denunció que los vehículos con las mismas características de otra marca, como Nissan, se podían haber adquirido a 39 mil 990 dólares y otros descuentos por una flota de 10 vehículos. El comité de adjudicación adquirió cada unidad de marca Chevrolet –de fabricación tailandesa– por 144 mil 700 soles, un aproximado de 43 mil dólares cada una.
Sin embargo, la Municipalidad Provincial de Ica adquirió las camionetas a la empresa RGR Equipos y Maquinarias EIRL que inició sus actividades el 1 de abril del año pasado. Según la cotización que obtuvo el regidor César Magallanes, Almacenes Santa Clara SA propuso vender camionetas marca Chevrolet a precio unitario por la suma de 39 mil 490 dólares, pero si adquirían una flota de cinco vehículos, cada una se adquiría a 38 mil 490 dólares.
“Por 10 camionetas el descuento era mucho mayor”, comentó Magallanes.