Cadena perpetua para el “Monstruo de Moche”

La violación y muerte de una menor de dos años y 11 meses a manos de Elman Elder Liñán Barreto (26), bautizado como el “Monstruo de Moche”, en el distrito de Moche, la tarde del último viernes, ha causado mucha indignación y consternación en la población, hasta llegar al punto de pedir la pena de muerte. Por la forma de cómo actuó (según su confesión durante la reconstrucción de los hechos), podría ser condenado a cadena perpetua.

SIN CONTEMPLACIÓN. El abogado y exfiscal de La Libertad, Alfredo Galindo, conversó con Correo y dijo que el delito que cometió Elman Elder Liñán Barreto es muy grave por la edad de la niña y por la forma cómo la mataron. “El delito que cometió este hombre (Liñán Barreto) se condena con cadena perpetua y esto lo establece la norma penal. Hay que recordar que solo la violación sexual a una menor de 10 años es cadena perpetua, pero si muere es un agravante, lo que lo convierte como gravísimo”, manifestó.

Muchos abogados buscan estrategias legales para reducir las penas de sus clientes, pero en este caso sería casi imposible. “En mi caso le daría cadena perpetua, pero sabemos que van a buscar la manera de reducir su pena a 35 años. Yo lo veo bien complicado porque el autor del hecho ya tiene 24 años y ya no tiene responsabilidad restringida, que solo se les da a las personas que están entre 18 y 21 años. Al tener cadena perpetua ya no tiene ningún beneficio y solo se le daría un tratamiento psicológico”, siguió.

Pese a que el último sábado Elman Liñan fue llevado hasta el lugar del crimen para la reconstrucción, donde contó a la Policía y al Ministerio Público todo lo que pasó, tampoco sería considerada como confesión sincera porque a él lo buscaron y capturaron y no se entregó a la Policía. Además, tampoco puede alegar que estuvo ebrio para que le bajen la condena porque en este tipo de caso no es un atenuante.

PIDEN JUSTICIA Y GARANTÍAS. Ayer, los restos de la pequeña, identificada con las iniciales K.S.V.V., aún se encontraban en la morgue central de Trujillo a la espera de que se realice la necropsia de ley. En los exteriores se encontraba su madre, Agustina Vera Briceño (21), quien junto a otros familiares esperaba sentada que le entreguen el cuerpo para que le dé una cristiana sepultura.

“Solo pido justicia para mi hijita. Ella no debió morir así. Era muy pequeña para que la maten de esta manera. Que al culpable no lo dejen libre y si hay alguien más implicado que también pague con todo el peso de la ley. Quiero pedir garantías para mi vida por temor a represalias por parte de su familia (del asesino)”, dijo Agustina Vera.

Por otro lado, en la casa de la víctima, por el exfundo Larrea, los familiares a la espera de su cuerpo velaban una foto de ella junto con sus muñecas y peluches.

Confesión. La tarde del sábado se llevó la reconstrucción del crimen y Elman Elder Liñán Barreto fue llevado hasta una acequia del río Moche, donde contó con total frialdad lo que sucedió. Para ello, utilizó un peluche color rosa para simular que era la niña.

“Estaba tomando con unos amigos y la vi que estaba en la calle, por lo que me acerqué a ella y con engaños la llevé con dirección al río. Allí, le quité su ropa (la que llevaba en la parte de abajo) y la violé. Al ver que estaba llorando la estrangulé y luego arrojé su cuerpo al agua”, sostuvo ante la Policía y el Ministerio Público.

“Luego fui a mi casa, pedí que me den de comer y al ver que me estaban buscando me escondí en un pozo”, finalizó.