El punto en agenda era uno solo y tenía suma importancia. A las 9:00 de la mañana de ayer, el gerente del Servicio de Gestión Ambiental de Trujillo (Segat), Carlos Delgado Sánchez, tenía que presentarse ante el pleno de regidores de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT) para responder por el proceso de tercerización del servicio de limpieza pública y las supuestas irregularidades cometidas en su gestión.
Los concejales llegaron a la hora prevista y tomaron posición en sus respectivas ubicaciones. El regidor oficialista Fernando Rojas Urquiza tuvo que reemplazar al alcalde en la mesa directiva porque Elidio Espinoza Quispe viajó a Lima invitado por el Ministerio de Vivienda.
APARECE. Tal lo acordado, Carlos Delgado hizo su aparición en el Salón Consistorial. El gerente del Segat vestía sport y llevaba una agenda en la mano. En una primera impresión, el funcionario aparentaba tranquilidad, pero de rato en rato hacía unos gestos que reflejaban que algo en él no andaba bien.
Sin embargo, fue invitado a ubicarse al lado del podio de conferencias para que empiece su exposición. Lo que vino luego fue simple: el funcionario no expresó ninguna frase que tenga que ver con el proceso de tercerización del Segat.
MAL DE SALUD. Carlos Delgado solo habló para solicitar que le reprogramen su citación ante el pleno porque tenía, en ese momento, la salud resquebrajada.
“Estoy mal de salud y pido por favor que reprogramen mi exposición”, fue lo que dijo el funcionario.
Esto les cambió el rostro a varios regidores que se habían preparado para debatir con Carlos Delgado sobre el proceso de tercerización y escuchar lo que tenía que decir por los cuestionamientos a su gestión.
QUE DEMUESTRE. El concejal Hernán Aquino y Rocío Taboada pidieron que demuestre cuál era el mal de salud que presentaba y que evidencie la documentación que acreditaba lo que decía.
Fue entonces que Fernando Rojas informó a sus colegas que el funcionario había presentado a la secretaria “algunos documentos” que demostraban que, efectivamente, se encontraba mal de salud.
Pero, en realidad lo que había mostrado Carlos Delgado fue una cita médica en la cual se precisaba que esa mañana tenía que acercarse al hospital Salud Primavera para sacarse una ecografía abdominal.
Esto último prendió la pradera y exacerbó los ánimos de la mayoría de regidores, quienes consideraron que el funcionario podía haber cambiado la fecha para acudir al nosocomio y atenderse.
QUE SE RETIRE. Fernando Rojas, quien dirigía la sesión, pidió a sus colegas someter a votación la solicitud del funcionario para que pueda retirarse y cumpla con su cita en el hospital. Pero, Hernán Aquino, evidentemente fastidiado, comentó: “Que se vaya nomás, sin votación”.
No obstante, en medio del barullo y los diversos comentarios de los concejales, se votó y se aprobó que se retirará Carlos Delgado de la sala de sesiones.
Asimismo, se aprobó por unanimidad que el gerente del Segat regrese ante el pleno el próximo lunes a las 9:00 de la mañana, para que responda por todas las supuestas irregularidades que se estarían registrando en este Organismo Público Descentralizado.
EMPEORA. Empero, mientras Carlos Rojas se retiraba del Salón Consistorial, al parecer empezó a sentir dolores más intensos y fue necesario que un agente de seguridad de la MPT lo ayude a bajar las escaleras. El buen servidor acompañó al funcionario, siempre cogiéndolo del brazo, hasta la camioneta que lo esperaba en los exteriores de la comuna.
“Me siento mal. Aclararé esto después. Pero, vayan al hospital Primavera, que le pertenece, ustedes saben ya a que partido político (SIC)”, comentó con una voz débil el funcionario, cuando los periodistas le preguntaban por qué se retiraba de esa manera.
¿No era posible cambiar la fecha de su cita en el hospital? Repreguntamos. “Lo que me está pasando es algo que yo no sabía que iba a pasar; por ejemplo, hoy murió mi mascota y yo no sabía que iba a morir (sic)”, agregó para después alejarse en su camioneta.
LO CONFIRMA. Pasado el “bochorno” que vivió en la sesión de concejo, Correo volvió a contactarse con Carlos Delgado para preguntarle cómo se encontraba su salud, y ya más calmado manifestó: “Yo sí estoy mal de salud y también estoy muy triste porque murió mi perrito; pero no hay problema, seguimos adelante. Yo me he presentado mal y por eso he pedido la reprogramación. He tenido fiebre y he estado mal del estómago. Sucede que comí un frito y una chicha morada helada. Tengo los recibos del restaurante, nada está preparado”, añadió.
FALTA DE RESPETO. Consultada sobre la situación que se vivió en la sesión de concejo, la regidora Esperanza Yarlequé Saldaña calificó como una “vergüenza” y una clara “falta de respeto a todo Trujillo” y al pleno lo hecho por Carlos Delgado.
“El proceso para tercerizar el Segat está viciado desde el inicio, porque se está trabajando bajo la mesa. No hay transparencia y esto es el resultado de la gestión de este alcalde actual”, enfatizó.
La concejal Rocío Taboada coincidió con Esperanza Yarlequé y opinó que es una burla a los trujillanos lo hecho por el gerente del Segat.
“Acá se nota el complot que existe entre la municipalidad y Carlos Delgado porque este señor solo ha presentado una cita médica en la que indica que tiene que acudir al hospital a sacarse análisis de sangre y abdominal; esto no es urgencia, ni emergencia. Él tranquilamente pudo haber expuesto; pero ya vemos que el señor no tiene el sustento técnico para levantar las observaciones que se han hecho al proceso de tercerización”, resaltó.
Pero, hubo otros regidores que decidieron darle el voto de confianza a Carlos Delgado y optaron por creer en él.
Se trata de Liseth Ruiz y Pablo Penagos, quienes propusieron dejarlo ir, ya que de por medio estaba la salud del funcinario. “Hay que citarlo para otra fecha y listo”, dijo Liseth Ruiz.