La Libertad: La inminente caída de César Acuña en medio del fragor electoral

El domingo pasado, este diario lo había anticipado a través de su portada misma, con la cara de César Acuña de fondo: “Con un pie afuera”.

Dos días después se hizo público el inicio del proceso de exclusión a su candidatura presidencial, por parte del Jurado Nacional de Elecciones, esto por haber entregado dinero en plena campaña electoral. Y la situación se puso aún más color de hormiga para el candidato de Alianza Para el Progreso, que ya bastantes problemas ha tenido en las últimas semanas.

En consecuencia, una de las noticias de esta semana es la situación endeble en la que se encuentra la candidatura de César Acuña, la misma que podría quedar fuera. Mañana, el voto del jurado definiría esta situación.

ENCUESTAS Y LAY. Mientras tanto, los resultados en las encuestas han terminado por castigar la mala situación por la que atraviesa la candidatura de Acuña.

En efecto, estas encuestas revelan que la intención de voto de Acuña ha caído estrepitosamente, entre 5% y 7% en promedio, como resultado aparente de la serie de denuncias que le han caído de manera indetenible, unas más graves que otras.

Y como si esto fuera poco, como una cereza al pastel, llegó la renuncia de Humberto Lay. Y, e ncima, el Tribunal del Pacto Ético, el cual el mismo Acuña suscribió junto al resto de candidatos presidenciales, declaró que no tiene “idoneidad ética” para gobernar.

SIGUE EN CARRERA. En tanto, la otra noticia que ha tenido en vilo al país entero, por decirlo de algún modo, ha sido la indefinición en torno a la candidatura de Julio Guzmán. Esta semana que pasó por fin el Jurado Electoral Especial de Lima dio su veredicto y declaró admitida su postulación.

El hecho fue celebrado por Guzmán, que recibió la noticia cuando se encontraba en el Cusco, y por sus numerosos seguidores. También, por supuesto, fue rechazado por sus oponentes políticos que antes decían esperar que continúe en carrera.

Sin embargo, la historia no ha terminado. La candidatura de Julio Guzmán ha vuelto a ser objeto de cuestionamientos a través de tachas interpuestas y ahora estas deberán resolverse en un plazo determinado.

Una situación que no hace más que echar más sombras sobre un proceso en el que las propuestas siguen quedando de lado.