Los blancos días y las negras noches
Los blancos días y las negras noches

Bajo un cielo azul y un sol radiante de domingo que invitaba a la celebración anticipada, el equipo de y sus numerosos hinchas trujillanos sonreían con su victoria sobre el Cantolao, por 3-1. La fiesta parece continuar, pues Mannucci se ha consolidado en la punta de la Segunda Profesional y sus aspiraciones de regresar a Primera son cada vez más serias.

Un día antes, sin embargo, el mismo estadio Mansiche había sido testigo de una nueva caída estrepitosa de la Universidad , esta vez ante el Juan Aurich, e irónicamente con el mismo resultado pero a la inversa: 1-3. Su derrota amarga, porque empezó ganando, lo ha confinado al penúltimo lugar y sus posibilidades de ir al descenso son cada vez más reales.

Mannucci ha atravesado años difíciles en las últimas dos décadas colmadas de desilusiones y fracasos. Vallejo ha traído algunos logros para el fútbol trujillano -como su emotiva llegada a cuartos de final de la Copa Sudamericana- y ha buscado aún con poco éxito consolidarse como el gran equipo de la hinchada trujillana.

La vida es una sucesión de ciclos, ya se sabe. Y, como diría Jorge Luis Borges, está plagada de “blancos días y negras noches”. El equipo de la Universidad César Vallejo parece reflejar hoy las desventuras de su dueño, César Acuña, que de ser el político y empresario exitoso e intocable del norte del país ha pasado a ser acorralado por cierto descrédito nacional y por la justicia, que lo ha puesto sobre el tapete por tres casos puntuales.

No son pocos los recuerdan que años atrás el entonces dirigente del Carlos A. Mannucci, Daniel Salaverry, insinuaba que los fracasos del equipo tricolor estaban íntimamente relacionados al poder de Acuña. No hay nada que pueda ser corroborado en este aspecto, en esta leyenda urbana que podría hasta sonar a justificación ante la hinchada. Sin embargo el mismo Salaverry supo lo que es darle cara a la derrota no solo con Mannucci, sino también con la política, cuando renunció al Apra y postuló fallidamente a la alcaldía de Trujillo en el 2014. Y hoy lo vemos como electo congresista convertido en uno de los rostros de la renovación fujimorista a nivel nacional. Todo da vueltas, decían nuestros abuelos.