Orellana cae en Colombia y su hermana al norte de Lima

El empresario peruano Rodolfo Orellana, acusado de dirigir una red criminal y prófugo de la justicia, fue detenido ayer en la ciudad colombiana de Cali en una operación conjunta de Perú y Colombia, con el apoyo de la DEA y la Interpol.

La detención, que fue confirmada por el presidente Ollanta Humala desde Roma, se produjo en un apartamento de Cali, al parecer de propiedad de un familiar de un narcotraficante cafetero.

ESTABA PEDIDO. Sobre el detenido Orellana “pesaba una orden de captura en circular roja por cargos de asociación ilícita y lavado de activos”.

Como era conocido, Orellana lideraba, junto a su hermana, una extensa red criminal que incluía abogados, funcionarios judiciales, miembros de la policía activos y en retiro, políticos, notarios y registradores, cuya finalidad era la de apropiarse de bienes a través de la comisión de diferentes delitos de carácter patrimonial.

Para cometer estos delitos, utilizaba la intimidación y la violencia física y sicológica contra las personas que los denunciaban o investigaban.

Orellana se fugó de la justicia de Perú hace más de 130 días y es, además, investigado por presuntos nexos con el narcotráfico.

La captura de Orellana se dio a casi tres semanas de la detención del coronel retirado de la Policía Nacional Benedicto Jiménez, su lugarteniente más conocido dentro de la organización criminal y quien se dedicaba a amedrentar a los jueces y fiscales que investigaban a la red.

LO ENTREGAN PRONTO. Sobre el tema, el presidente Juan Manuel Santos afirmó ayer que Orellana será entregado a las autoridades peruanas “entre hoy (jueves) y mañana (viernes)”.

Durante un discurso con motivo del 95 aniversario de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), Santos confirmó que en Cali se capturó al “individuo más buscado por las autoridades peruanas”, al que llamó “alias el Gordo”, para indicar también que habló con su homólogo Ollanta Humala, quien le agradeció la colaboración colombiana en este operativo.

“Las autoridades peruanas nos pidieron colaboración para poder capturar a este individuo y en una operación conjunta se logró. Entre hoy y mañana este individuo será entregado al Gobierno, a las autoridades peruanas”, remarcó el presidente de Colombia.

Según Santos, el arresto, que se sumó a otros 41 practicados también en Cali a miembros de bandas criminales, “es un mensaje a los bandidos en Colombia y en el resto de los países donde estamos colaborando, que no hay sitio para esconderse, no hay sitio donde no los vayamos a buscar.

Asimismo, puntualizó que la “colaboración con la Policía peruana se da en todos los frentes, también se da en el frente militar, se da en la lucha contra la minería ilegal”.

CAE HERMANA. Orellana fue detenido en una residencia de Cali durante un operativo conjunto de las autoridades de ambos países, junto a la DEA y la Interpol, que de forma simultánea dio como resultado el arresto de su hermana Ludith en Huaral, al norte de Lima.

Al ser detenido, Orellana se identificó con una cédula de ciudadanía número 06750549 y reconoció ser la persona que buscaban. Nunca ocultó su nacionalidad peruana.

La Policía colombiana estableció que el empresario peruano ingresó a territorio colombiano hace dos meses y estuvo oculto en Cali, donde vivían algunos de sus amigos y contactos.

Estas personas lo mantuvieron escondido mientras tramitaba documentación falsa que le permitiera montar una identidad de fachada para salir del país rumbo a Suecia, donde aparentemente residen algunos de sus hermanos. Su propósito era obtener protección en ese país, según fuentes policiales colombianas del caso.

Desde hace cuatro meses, Orellana estaba prófugo de la justicia peruana y tenía circular roja de Interpol, expedida el 3 de setiembre de 2014, por la Policía Internacional para casos de delitos de lavado de activos y asociación para delinquir.

Para ubicarlo, varios investigadores de la Dijin se infiltraron en el conjunto residencial, hasta establecer la casa exacta en la que se ocultaba.

Hace cuatro días arribaron a Colombia funcionarios peruanos, representantes de la Fiscalía y de la Policía, para conocer de primera mano los avances en las investigaciones y facilitar la identificación de Orellana.

A BOGOTÁ. Por la tarde, Orellana fue trasladado por las autoridades de Cali al hangar de la DEA en Bogotá y luego iba a ser puesto a disposición de las autoridades judiciales competentes, mientras avanzan los trámites administrativos para su envío al Perú.

PERSEGUIDO, NO. Al momento de su captura, Orellana declaró que su aprehensión es una “cortina de humo” y que él es un “perseguido político” en el Perú.

Poco después, el ministro de Trabajo, Fredy Otárola, rechazó estas afirmaciones.

“Ha intervenido la inteligencia de tres países y no creo que todos ellos se hayan prestado a una persecución política”, manifestó en declaraciones a RPP.

En ese sentido, el también parlamentario oficialista calificó de “risible” lo expresado por Orellana.

Otárola indicó que tanto la Policía peruana como la colombiana, además de la DEA, seguían el rastro de este personaje.

La participación de la última entidad mencionada explica por qué el embajador estadounidense en el país saludó esta detención, afirmó.