Autorizan entierro de 21 cadáveres  en Chiclayo
Autorizan entierro de 21 cadáveres en Chiclayo

Escrito por Alicia Tovar

El incrementado de casos positivos de Covid-19 no se detiene en Lambayeque. La Gerencia Regional de Salud confirmó que 642 personas están infectadas con el nuevo coronavirus.

En medio de esta emergencia sin precedentes, 21 cadáveres fueron enterrados ayer en el cementerio “El Carmen” que administra la Sociedad de Beneficencia de .

CIFRAS

En el día 33 del Estado de Emergencia Nacional, Lambayeque continua siendo la segunda región con más casos confirmados de Covid-19.

En todo el país, 13 mil 489 personas han dado positivo en las pruebas moleculares y pruebas rápidas (serológicas) que se utilizan para el diagnostico de coronovirus.

Según la Gerencia Regional de Salud (Geresa), en Lambayeque existen 642 casos positivos de Covid19 y 76 personas han fallecido, víctimas de la pandemia.

El mayor porcentaje de contagio se observa en los distritos de Chiclayo (151 casos) y Ferreñafe (118).

En el reporte oficial de la Geresa también aparecen los distritos de José Leonardo Ortiz, con 70 casos, Monsefú, donde se han confirmado 61 casos, y Lambayeque con 53 pacientes afectados.

La pandemia también alcanza a otros veintidós distritos de la región, entre ellos, La Victoria, Pueblo Nuevo, Tumán, Ciudad Eten y Reque.

En algunos casos como Salas, Pucalá, Pítipo, Jayanca y Mesones Muro; apenas se ha registrado un caso positivo del nuevo coronavirus.

INDICACIONES

Con el incremento de pacientes fallecidos por Covid-19, cada día surgen nuevas interrogantes sobre cómo debe ser el tratamiento de los cadáveres para evitar la propagación del virus.

Luego de inconvenientes en Pimentel y Tumán donde la población rechazó el traslado de cadáveres, el Comando Covid Regional anunció el uso de cementerios temporal en terrenos alejados de las zonas urbanas.

Hasta hace una semana, se dispuso la habilitación de cuatro cementerios temporales en Pimentel, Ferreñafe, Lambayeque y Tumán.

Monsefú fue el más reciente distrito donde el Comando Covid autorizó un cementerio temporal en el sector “La Bocana”, en un terreno cedido por la Comunidad Campesina “San Pedro”.

En estos cementerios temporales, los cadáveres pueden ser enterrados en fosas individuales con una profundidad de hasta 2 metros bajo tierra.

Previamente, el cadáver debe ser colocado en una bolsa herméticamente cerrada, según la directiva sanitaria N° 087-2020 del Ministerio de Salud.

La bolsa tiene que ser pulverizada con desinfectante compuesto por una solución de hipoclorito de sodio.

Una vez realizado este paso, se coloca la bolsa con el cadáver en un ataúd que no “será abierto por ningún motivo”.

De inmediato, se debe trasladar el ataúd al cementerio “de la jurisdicción distrital o provincial” para ser inhumado.

Estas indicaciones aparecen en el informe técnico N° 010-2020 que elaboró la Dirección de Salud Ambiental de la Geresa, el pasado 14 de abril.

En un parte de este documento, se menciona que también es posible la inhumación de cadáveres de Covid-19 en un nicho siempre que se cumpla lo establecido en la Ley de Cementerios y Servicios Funerarios.

Es decir, que los nichos tengan las dimensiones mínimas establecidas para adultos o nichos, y con una cobertura de tapa de concentro de 5 centímetros de espesor, sellado con cemento y arena.

INTERVENCIÓN

Hasta hace unos días, el Comando Covid había cumplido con utilizar fosas individuales en cementerios temporales, en lugar de los nichos en cementerios de propiedad municipal o privada.

Sin embargo, este Comando dirigido por el Ejército sorprendió ayer con el traslado de 21 cadáveres de Covid19 al cementerio “El Carmen” de la Sociedad de Beneficencia.

Fuentes consultadas por Coreo indicaron que las coordinaciones empezaron al promediar las 9 de la noche del 16 de abril.

La autorización para este entierro fue dada por el presidente del directorio de la Sociedad de Beneficencia, Oswaldo Mendoza Otiniano y el actual gerente de esta entidad Francisco Prada Luna.

Este último se comunicó con el administrador del cementerio para que autorice el ingreso de una tropa del Ejército.

Los cuerpos fueron enterrados en la séptima fila del último pabellón (“Don Josemaría Escrivá”) del cementerio.

Fuentes que conocieron el hecho aseguraron a este medio que el personal del Ejército tenía los materiales de protección personal (overoles blancos) mientras que los vigilantes del cementerio solo portaron mascarillas durante el entierro.

Correo intentó comunicarse con el presidente del directorio de la Sociedad de Beneficencia, pero no obtuvimos respuesta.

Quien sí accedió a declarar fue el alcalde provincial de Chiclayo, Marcos Gasco Arrobas. La autoridad aclaró que no puede intervenir en los entierros que se realicen en cementerios o terrenos que son administrados por la Beneficencia.

“Los municipios distritales sí tienen esa facultad de estar encargado de las defunciones porque no tienen una Beneficencia Pública”, mencionó el burgomaestre.

El Jefe de la Oficina Defensoríal de Lambayeque, Julio Hidalgo Reyes, destacó que las inhumaciones en nichos sí están autorizadas por el Ministerio de Salud.

Por esta razón sostuvo que la Dirección de Salud Ambiental y la Geresa son responsables de explicar a la población cómo se realizarán estos entierros para evitar cualquier riesgo de contagio.

“De acuerdo a la norma técnica, es posible enterrar en nichos. No menciona si el cementerio está en una zona urbana o no. Si hubiera alguna duda, quien debe resolverlo es la Dirección de Salud Ambiental. Las autoridades de Salud no están informando“, agregó.