El drama de las madres que luchan a diario por sus hijos

Se dice que la madre es única y en esta vida solo hay una para cada familia, pero aún así muchas personas no las valoran cómo debe ser, pues en muchas mujeres se refleja la tristeza en el rostro al haber sido abandonadas por su hijos, mientras que en otros casos, luchan día a día para sacar adelante a sus vástagos.

CASOS. “Yo soy ya una anciana y tengo que seguir trabajando para poder costear los medicamentos del último de mis hijos que padece de cáncer. Vendo coquitos, lavo ropa y hasta pido dinero en las calles porque con lo que trabajo no logro reunir la plata para las ampollas y a veces con las justa saco para comer. Por eso pido a las autoridades que me ayuden porque mis hijos mayores prácticamente me abandonaron y no tengo el apoyo de ellos”, es el llanto de una madre triste.

Se trata de María Isabel Sánchez Sánchez (67), quien es viuda y madre de cinco hijos y vive casi en la total pobreza. Ella reside en la manzana D lote 11 del sector La Pradera con el último de sus vástagos Roberto Gonzáles Sánchez (47), el mismo que actualmente está muy delicado de salud, debido a que sufre de cirrosis.

Señala que gana muy poco en la venta de dulces y como toda madre no desea que su hijo muera, esto pese a que los mayores quieren que eso suceda.

“Pido a las autoridades que me apoyen aunque sea para mi comida o ropita para mi hijo, mis colchones están muy viejos y ya no tengo en donde dormir. Me despierto muy temprano para salir a trabajar en lo que yo puedo”, sostuvo la anciana.

Otro caso es el de Rosario del Carmen Enríquez Sosa (45), quien tiene tres hijos de 11, 5 y 3 años de edad y trabaja arduamente para sacarlos adelante. A ella, el padre de sus niños la abandonó y no les pasa ni un solo centavo para sus alimentos y otras necesidades.

“Soy madre soltera y me dedico a vender golosinas, regalos, lavo ropa en varias casas y pese a estar delicada sigo adelante para que a mis hijos no les falte un pan en la mesa. El papá de ellos se fue porque no nos llevábamos muy bien en la relación y ahora soy padre y madre. Yo estoy en pie desde las 5 y 30 de la mañana para buscármela en el trabajo”, añadió.

Dio un consejo a todas las mamitas que pasan por esa misma situación, dijo que no deben dejarse caer y seguir para adelante siempre por el camino correcto para cuando sus vástagos sean grandes no sientan vergüenza de ellas.

Además, indicó que el rol de ser madre es muy grande, pero a la vez muy hermoso.

“Cada vez que miro a mis hijos durmiendo o sonriendo me da más fuerzas para seguir adelante y que la vida sí tiene sentido”, anotó.

Al igual que estas dos mamitas existen miles de casos similares.

MENDICIDAD. Por otro lado en la comisaría de La Familia, se tiene registrado al menos unas 30 adolescentes, cuyas edades oscilan entre los 14, 15, 16 y 17 años de edad, que son madres y junto a sus hijos se dedican a la mendicidad u otras venden caramelos hasta altas horas de la noche, sin importarles el frío para sus pequeños.

La jefa de la mencionada dependencia policial, capitán PNP, Cynthia Mantilla Delgado, quien también es mamá de un niño de 9 años de edad, dio a conocer que por disposición del general PNP jefe de la Macro Región Policial, Lucas Núñez Córdova, realizan constantes operativo para evitar que continúen en lo mismo, puesto que tanto mamás jóvenes como adultas utilizan a los niños para la venta y pedir dinero en las calles.

“Nosotros realizamos los operativos en coordinación con la Fiscalía de Familia porque esos niños deberían estar estudiando o en algún taller gratuito. Existen clubs para deportes, drogas, pandillaje y otros. Entre los casos vemos que algunas son madres solteras y señalan que ellas tienen que trabajar con sus hijos porque según dicen es rentable para ellas”, informó.

De igual forma, la oficial manifestó que han tenido a tres ancianas en custodia porque fueron abandonadas por sus hijos. Asimismo, en los meses de febrero y abril encontraron a dos menores en total estado de abandono y por lo tanto fueron separados de sus padres y llevados a unos albergues.

“Para mí como madre es muy triste ver a los niños a veces durmiendo en el suelo u otros que son abandonados. Si los traemos al mundo es para amarlos, darles educación, una familia armoniosa y no para dejarlos que se conviertan en hampones por haber estado en hogares disfuncionales o porque simplemente no les prestaron atención desde pequeños”, afirmó.

De igual forma, dijo que en la comisaría cuentan con dos psicólogos para tratar a los padres e hijos, además el personal policial que labora allí, 25 son mamás y saben como enfrentar la situación.

ADOLESCENTES. Entre las menores que son mamás, una de ellos aseguró que les resulta rentable pedir o vender dulces con sus hijos en brazos, pues a veces llegan a ganar desde S/ 80 a S/ 100 de forma diaria.

En algunos casos los papás de sus niños también son adolescentes, cuando en realidad ambos deberían estar en el colegio terminando el nivel secundario, pero optaron por convertirse en padres a temprana edad.

“Mis padres eran separados y mi mamá también me traía a vender con ella o me hacía pedir dinero a los taxistas en cada semáforo. Allí me conocí con el papá de mi bebita y nos juntamos. Él también vende caramelos, en varias oportunidades hemos sido intervenidos por la Policía. En el día de la madre vamos a trabajar más para comprarle la leche a mi hija”, narró E.S.O.V. (16).

Pese a lo que dicen que ganan a diario, a simple vista se les nota que están mal alimentados, peor aún también exponen al peligro de la calle a sus hijitos.

Por otro lado, existen mujeres que han gastado bastante dinero en tratamientos para lograr concebir un bebé, pero lamentablemente no han podido ser madres.

“Es la tristeza más grande que llevo en mi corazón porque mi madre que en paz descanse siempre quiso conocer a uno de sus nietos, o sea un hijo mío, pero no lo logré y ay Dios sabrá porque suceden las cosas. Además, también es un poco difícil adoptar un niño”, agregó Perseveranda M.S. (55).

Mientras que otra mujer recordó que se convirtió en madre a través de la adopción y ahora quien fuera su bebé se ha convertido en un joven a quien ama con todo su ser.

“Para mí es mi hijo de sangre quien ahora me ha dado dos nietos preciosos. Madre no solo es la que engendra, si no también la que cría y yo obtuve a mi bebé desde que tenía 15 días de nacido. Desde el primer día que lo vi para mí fue mi todo y es por él que trabajé duro para que nada le faltara, le di educación y es así que es todo un profesional. Mi niño se enteró que yo no era su mamá biológica cuando tenía 13 años de edad, pero afortunadamente lo asimiló bien y me abrazó y besó. Dijo que para él yo soy su verdadera mamá”, puntualizó una madre quien evitó identificarse.

Es así que hoy domingo, diario Correo les desea una feliz día a todas las mamitas de la región Lambayeque.