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Nadie se va a la otra sin pagarla. Reza un viejo refrán, el cual podría caerle a pelo a esta historia. El amor entre el exalcalde de Chiclayo, Roberto Torres Gonzales y su amada Katiuska del Castillo Muro, no habría sido del todo limpio.

Los sindicados “Jefe” (Beto Torres) y “Jefa” (Katiuska del Castillo) en la red criminal “Los limpios de la corrupción”, acusados de cometer una serie de delitos, entre estos lavado de activos, peculado, asociación ilícita para delinquir, todo en perjuicio de la Municipalidad Provincial de Chiclayo, siguen escribiendo un capítulo aparte, a pesar de estar ambos recluidos en el penal exPicsi.

LA CUTRA. Aunque las apariencias en torno a la pareja mostraba una historia de felicidad y amor por doquier, se conoció que “El Jefe” siempre trataba de darle la mejor vida y llena de comodidades a la bella Katiuska del Castillo, más no dinero en efectivo para sus exquisitos antojos, lo cual, aparentemente mortificaba a “La Jefa”, que a estas alturas de su vida, ya estaba acostumbrada a la opulencia.

Es así que, “La Jefa”, quien se presume conocía al revés y al derecho los “negocios” y coimas del exburgomaestre en la comuna, habría decidido poner en marcha un plan que le permitiera manejar su propio dinero sin necesidad de pedirle a Beto Torres, por lo tacaño que este, aparentemente, se mostraba a la hora de brindarle efectivo.

Se conoció que la Fiscalía tendría serios indicios para presumir que Katiuska del Castillo comenzó coger fuertes sumas de dinero a “El Jefe”, cuando fue nombrada jefa de la campaña política reeleccionista de Torres Gonzales, al ser la encargada de acopiar las nada despreciables cantidades de plata que los funcionarios, proveedores y demás implicados con esta red criminal tenían que reportar para la carrera proselitista.

LA ECHARON. Toda esta presunción del Ministerio Público se desprende, en gran parte, de las declaraciones que hicieran, entre otros, implicados y testigos ante los magistrados de la Fiscalía, entre ellos el exsubgerente de Logística de la municipalidad chiclayana, Segundo Deodato Alcántara Chávez, quien llegó a este puesto por influencia de la madre de Katiuska, Norma Muro Neyra.

“Katiuska del Castillo Muro era la jefa de la campaña. A mediados del mes de julio me llamó Pérez Bracamonte (exseguridad de “El Jefe”) informándome que debería acudir a la reunión de todos los funcionarios municipales que se realizaría en el segundo piso del local del partido, ubicado en el óvalo Villarreal. Cuando llegué al lugar, ya se encontraban varios funcionarios municipales, en dicha reunión se trató el aporte económico por parte de los funcionarios, indicándonos que deberíamos asistir de manera obligatoria a las caravanas. Esa cita la presidió Katiuska del Castillo con César Regalado”, dijo Segundo Deodato Alcántara.

El exfuncionario sigue narrando y añade: “César Regalado propone que cada subgerente aporte de su sueldo S/. 200 y los gerentes S/. 300. El recaudador sería Fernando Fernández en el caso de la municipalidad; en la Beneficencia el señor Abel Salazar; en el caso del Satch sería José Bocanegra Granda y en Epsel el recaudador era Percy Quesquén”, dijo.

Alcántara Chávez sostiene también, que en aquella reunión, Katiuska del Castillo le dijo que, por ser subgerente de Logística tenía que apoyar con el pago del transporte de la propaganda política.

“Me indicó que salían tres veces por semana y el gasto era de S/. 250 soles diarios. Al día siguiente me llama por teléfono (Katiuska) y me dice: Segundo, ya debo tres días de transporte. Acto seguido me insistió que pidiera apoyo a los proveedores y yo empecé a llamarlos”, enfatizó.

En otro momento, Alcántara cuenta que las actividades pro fondos de la campaña proselitista continuaron.

“A fines de agosto, el partido organiza un almuerzo en el Jockey Club y cada tarjeta valía 100 soles. César Regalado nos cita y nos dice que nos darían 10 tarjetas a cada uno de los funcionarios de Epsel, Satch, Beneficencia y MPCh y me dice que como yo era de Logística me darían 40 tarjetas para que las vendiera a los proveedores y contratistas, a lo que yo me opuse, indicándole que como no les pagaban, no me iban a comprar”, indica Alcántara.

El exsubgerente de Logística señala que el almuerzo dejó una ganancia de casi 80 mil soles, y tocó la orquesta de César Regalado. “Debo indicar que, Gisela Villegas Núñez (proveedora de la MPCh), amiga de Katiuska, también participó en la organización del almuerzo”, afirmó.

Asimismo, Segundo Deodato Alcántara indica, “es ahí que Katiuska me dice: siéntate y se pone a conversar conmigo comentándome: yo acá sentada estoy perdiendo plata, lo que tú me estás dando es para el partido. Luego me pide: sácame compras y obras. Yo le digo: mira Katiuska, en este año, el 90% de obras han sido por contrata, no por administración directa, lo que puedo hacer es sacar la relación de obras pendientes de licitación y tu coordínalo con Carlos Mendoza. Ella me contesta: ese pendejo de Mendoza se las lleva todas, creo que no le da al alcalde todo, contó el exfuncionario, quien deja entrever que Katiuska le insinuó que si Beto Torres era reelecto, votaría a Mendoza Oliden, Jorge Matallana y Fernando Fernández.

Alcántara remarca que Katiuska le dio la orden para que al día siguiente le sacara la relación de todos los contratos de locación de servicios, de las obras que se habían licitado y el monto de las obras que estaban pendientes de licitación.

“Al día siguiente, Katiuska mandó a una persona, que no conozco, a recoger la información. Luego de una hora me llama (Katiuska) por teléfono preguntándome si toda esa cantidad de obras se había licitado, las que hacían un aproximado de 42 millones de soles, porque al alcalde no le habían dado el 10% de todo; yo le contesté que yo no sabía, que le preguntara a Carlos Mendoza”, acotó.