Controversia por una posible tercera dosis Covid-19

La detección de ocho trabajadores de salud que se vacunaron con una tercera dosis, pese a haber sido inoculados con la vacuna Sinopharm, ha expuesto la controversia que existe en los gremios del sector salud.

El Colegio Médico apuesta porque el personal de salud y ocupacional acceda a una tercera dosis para “reforzar” su protección ante el virus SARS-CoV-2.

Sin embargo, la Federación Médica recomienda prudencia para conocer - a través de las nuevas investigaciones científicas- si una tercera dosis es conveniente.

Temores

La posibilidad de una tercera dosis de la vacuna contra la Covid19 es un tema que ya se debate al interior del Colegio Médico.

El pasado 29 de abril, el decano nacional de este colegio profesional, Miguel Palacios Cel, envío una carta al respecto al ministro de Salud, Óscar Ugarte.

En la misiva, le solicita que “tome las previsiones del caso” para que se pueda destinar una tercera dosis al personal que trabaja en primera línea.

El propósito, según indican, es “reforzar la inmunidad” de los trabajadores de salud. “En el momento que usted destine conveniente podemos hacer la sustentación de esta necesidad”, refirió el decano.

A pesar de esta primera iniciativa, el ministro dijo que la propuesta de una tercera dosis se analizaría “si en su momento eso se requiriera”.

“Sabemos que los laboratorios están ensayando cómo mejorar su productos, sobre todo para enfrentar a las diversas variantes que están apareciendo”, dijo Ugarte un día antes de recibir la carta del Colegio Médico.

Desde entonces, no existe un pronunciamiento oficial del Ministerio de Salud (Minsa) que autorice la aplicación de terceras dosis. Sin embargo, el Sindicato Nacional Médico del Seguro Social (Sinamssop) tiene una propuesta distinta.

Este gremio está a favor de una nueva vacunación a los médicos, odontólogos y químicos farmacéuticos de Essalud con la vacuna del laboratorio Pfizer.

El decano del Colegio Médico en Lambayeque, Hernán Huamán Aliaga, señaló que estas propuestas surgen por el temor del personal de salud ante las nuevas variantes del virus y la falta de información en cuanto a la eficacia de la vacuna de Sinopharm.

Como se sabe, el estudio clínico de esta vacuna en el Perú, a cargo de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, aún no ha concluido.

“El único informe (que existe), de Emiratos Árabes, habla de una eficacia de 78%, (de la vacuna Sinopharm) comparado con Pfizer que es 95%”, expresó.

Para el decano, si el Minsa autoriza que se aplique una tercera dosis al personal de salud, esto sería una garantía para que se reincorporen a sus labores presenciales.

Por su parte, el presidente de la Federación Médica, Paul Larrea Alvarado, aclaró que todas las vacunas aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) protegen contra la letalidad y la enfermedad severa ocasionada por el Covid19.

“Toda vacuna que supere el 50% de la eficacia, la vacuna de Sinopharm, de Pfizer, protege. Ahora, serán los médicos ocupacionales los encargados de vigilar el retorno de los profesionales”, agregó.

Asimismo, dijo que se necesita designar un comité de vigilancia, a cargo del Colegio Médico, para evaluar el rigor con que los médicos ocupacionales eligen a los profesionales que volverán a hacer labor presencial.

“Se tendrá que individualizar los casos, porque es cierto que hay personas que seguirán siendo vulnerables y no podrán retornar, pero hay otras que han estado atendiendo en la parte privada”, argumentó.

Larrea Alvarado enfatizó que el retorno del personal de salud es esencial para no descuidar el seguimiento de las enfermedades crónicas en adultos y la vacunación regular en niños.

El especialista también recomendó esperar los resultados de las investigaciones que sigue cada laboratorio con respecto a una posible tercera dosis.

“No hay estudios publicados que indiquen que una tercera dosis es superior. Se tendría que investigar qué es mejor: tres dosis de Sinopharm o dos dosis de Sinopharm más una de Pfizer”, comentó.