Hermanitos se ahogan en una zanja de obra de saneamiento

“Mis cachanguitas, por qué me los has quitado Dios mío, por qué me los has quitado tan rápido. Solo tú sabes cómo te los has llevado. Quisiera que me los devolvieras, quisiera que despierten hijos míos, los amo inmensamente y ahora me dejan así, vacía. Te voy a extrañar mi Seferino, mis flaquitos, mis borrachitos como yo los llamaba”, es el llanto y lamento de una entristecida madre, quien en un abrir y cerrar de ojos perdió a dos de sus hijos y que hoy están en los brazos del creador.

ACCIDENTE. Sumidos en un profundo dolor indescriptible, José Heberth Bances Sandoval (28) y Marianela Olivos Farroñan (22) recordaron los trágicos momentos que les tocó vivir tras la muerte de sus dos primeros hijos: Eder Alonso (6) y José Seferino (4).

Entre lágrimas, el papá de los pequeños señaló que eran aproximadamente la 1 y 30 de la tarde del último miércoles, mientras que su esposa se hallaba preparando los alimentos en su casa ubicada en el caserío Fanupe Casa Blanca en el distrito de Mórrope, José Seferino estaba jugando y bañándose en una pequeña acequia de regadío que está en el frontis de su vivienda.

Bances Sandoval continúo narrando que luego apareció Eder Alonso y al ver que su hermanito caminó a lo largo del canal con dirección hacia la obra de agua y alcantarillado que se ejecuta hace un año, fue tras él. Según le contaron algunos vecinos, primero cae de cabeza el más pequeñito, luego el mayor por tratar de salvarlo también se arroja al hueco que se había formado al romperse un puente mientras excavaba un cargador frontal.

El hoyo tiene una profundidad de dos metros aproximadamente y se rellenó con el agua de la acequia.

“El maldito hueco del desagüe que lo han dejado debajo del puente y allí se han caído. El mayor por sacarlo a su hermanito también se lanzó. A mí me avisan como a los 15 minutos y allí he corrido y al toque me metí a sacarlos a mis hijitos, pero ya se habían ahogado y nada se pudo hacer”, sostiene.

De igual forma, la mamá con la voz entre cortada indicó que debieron colocar al menos unas cintas de seguridad y así sus pequeños no se acercaban a la zanja. Dijo que ellos siempre comían su fruta sentados frente a la acequia en donde jugaban y la cual recorrían, pero esta vez por culpa del hueco” fallecieron ahogados.

“Mis cholitos me dejan llorando, debieron poner mallas de protección para que no se acerquen, estaban sanitos, no estaban ni enfermos. Estaban comiendo platanitos, qué mala suerte mis cholitos, cómo me dejan”, decía la madre entre lágrimas.

La familia de las dos víctimas esperan que los que ejecutan la obra se hagan responsables de lo sucedido y la terminen lo más pronto posible para así evitar más muertes, debido a que en la zona hay varios niños que juegan por las zanjas.

OBRA. Por su parte, el especialista en metrados, costos y presupuestos por parte de la supervisión de la obra de saneamiento y alcantarillado, Rafael Inoñán, informó los trabajos los ejecuta el consorcio “Trujillo” desde el 25 de marzo del 2017, y están en la segunda ampliación de plazo que consiste cambiar todo el colector existente de una gestión anterior que no ha culminado la obra presupuestada en 6 millones 640 mil soles.

“Es un saldo de obra. Nosotros, producto del trabajo, a veces dañamos los canales, el puente se nos ha caído y ha venido el martes la junta de regantes a exigirnos que reaperturen el canal y por ello se ha soltado el agua. Los niños se han estado bañando normal y ellos han estado excavando hasta que han caído. Aquí hay responsabilidad de ambas partes”, agregó.

De igual forma, manifestó que lo que determine el Ministerio Público ellos cumplirán si existe o no responsabilidad por parte del consorcio, pero aún así cumplirán con la familia. “Los mismos trabajadores han armado una pequeña cuota y se la han dado a la familia. Aquí quiero hacer un llamado a los padres a que tengan cuidado con su hijos y respeten las cintas de seguridad o de peligro, hay niños que no hacen caso y se pasan y corre riesgo que caigan a una zanja”, acotó ayer, luego que tras la muerte de los hermanitos se colocaran cintas de seguridad.