De acuerdo con Produce, los tres centros de abastos son Caquetá (San Martín de Porres), Ramón Castilla (Mercado Central) y San Felipe (Surquillo), donde se comprobó que los tres tienen un avance de más del 90% en la implementación de medidas de bioseguridad. (Foto GEC)
De acuerdo con Produce, los tres centros de abastos son Caquetá (San Martín de Porres), Ramón Castilla (Mercado Central) y San Felipe (Surquillo), donde se comprobó que los tres tienen un avance de más del 90% en la implementación de medidas de bioseguridad. (Foto GEC)

El informó este viernes que tres de Lima abrirán sus puertas este lunes 25 de mayo tras implementar las medidas de bioseguridad que ayudarán a evitar la propagación del COVID-19.

De acuerdo con Produce, los tres centros de abastos son Caquetá (San Martín de Porres), Ramón Castilla (Mercado Central) y San Felipe (Surquillo), donde se comprobó que los tres tienen un avance de más del 90% en la implementación de medidas de bioseguridad.

En Caquetá, donde antes imperaba el desorden y la falta de señalización, tras las constantes visitas del Produce y de la comuna de San Martín de Porres, este panorama ha cambiado, garantizándose el distanciamiento social, en la mayoría de sus pabellones.

Asimismo, se han instalado lavaderos de mano, tachos de basura rotulados y se han establecido dos puntos de ingreso al mercado y cuatro de salida. Del mismo modo la comuna anunció que han dispuesto puntos estratégicos para estibadores y proveedores.

Hemos estado en una tarea ardua en el marco de la estrategia Te Cuido Perú supervisando los mercados, salvaguardando los criterios de salubridad, respecto al mercado de Caquetá, el objetivo es que este lunes ya pueda abrirse este importante conglomerado comercial”, enfatizó el viceministro mediante una nota de prensa.

Previa a esta inspección, el viceministro Salardi junto al equipo del Programa Nacional de Diversificación Productiva (PNDP), llegó al mercado Ramón Castilla más conocido como Mercado Central, donde se ha concluido con el demarcado de pisos para fijar el distanciamiento social.

Además, en los puestos se han instalado estructuras para evitar el contacto directo entre compradores y vendedores. Así también, se ha instalado un lavadero al ingreso del mercado, donde personal especial controla el lavado de manos con entrega de papel toalla y alcohol.

Se espera que el lunes próximo se levanten las demás observaciones, en cumplimiento al DS N°011-2020-PRODUCE de “Lineamientos para la regulación del funcionamiento de mercados de abasto y espacios temporales habilitados para el comercio de alimentos, en el marco de las acciones de prevención y contención del COVID-19”, publicados ayer en El Peruano.

Por último, el tercer establecimiento visitado, en miras de ser reabierto este lunes 25 de mayo, es el mercado San Felipe, el cual tiene casi 20 días de su clausura luego que 261 comerciantes dieran positivo al Covid-19.

En este lugar, se ha establecido un estricto control en el ingreso, pasando por la desinfección de manos en el lavabo portátil y el limpiado de suelas con lejía. A su vez, los corredores lucen más amplios y señalizados y se informó que cada puesto instalará estructuras que garanticen la distancia entre los vendedores con los compradores.

Esto ha sido un trabajo muy intenso, supervisando los centros de abastos de la capital, sin embargo, además de verificar que se cumplan con los lineamientos que regulan estos establecimientos, hay que ser cuidadosos en que todos los comerciantes involucrados regresen a laborar con sus pruebas negativas al COVID-19, haremos un seguimiento constante para que esto sea sostenible”, afirmó el viceministro.