En una operación que puso fin a 11 meses de incertidumbre, la Policía Nacional del Perú (PNP) logró desmantelar la peligrosa banda criminal conocida como “Los Tunches”. Esta organización, originaria de Iquitos, se especializaba en el marcaje y asalto a nivel nacional.

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El caso de Marcos Zúñiga, un empresario de 30 años, cuyos padres fueron brutalmente asesinados después de retirar 700 mil soles del banco, fue el punto de partida de las investigaciones policiales. La banda, conocida por su extrema crueldad, seguía meticulosamente a sus víctimas, como se evidencia en las grabaciones de las cámaras de seguridad del día del trágico suceso.

La investigación reveló que “Los Tunches” también habían atacado a otro empresario un año antes, después de que retirara una suma considerable de dinero.

Gracias a la labor de inteligencia, las autoridades lograron ubicar y detener a dos de los principales responsables, Paulo Ríos y Eduardo Dávila, en Lima y Barranco, respectivamente. Se espera que estos arrestos conduzcan a la desarticulación completa de la banda, ya que los detenidos enfrentan la opción de colaborar con la justicia para evitar duras condenas.

La captura de los líderes de esta organización delictiva marca un hito en la lucha contra el crimen organizado y busca llevar justicia a las víctimas.

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