En este feriado largo de Semana Santa, si tiene niños y estos días va a pasarlo en casa, o tiene planeado un paseo al campo o a la playa o un viaje, pues preste mucha atención a esta nota.

Los accidentes en menores como son asfixias por atragantamiento, caídas, quemaduras y hasta envenenamientos suelen incrementarse advirtió el Dr. Jordy Hidalgo Gamonal, jefe del Servicio de Emergencia del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN), quien recomendó a los padres a estar vigilantes.

“Los accidentes son frecuentes en los niños pero se incrementan en los fines de semana largo. Por ejemplo, en casos de caídas, el Servicio de Emergencia en una guardia normal reporta de 7 a 8 casos de niños y el 70% de ellos, gracias a Dios, es traumatismo leve, pero por estos días los incidentes se duplican”, precisó el especialista.

Entre los accidentes más conocidos que ingresan al INSN se encuentra la asfixia que puede darse dentro de la casa o en la calle ya que el menor encuentra objetos pequeños y los ingiere; la otra patología más frecuente son las quemaduras y ello se debe a que los infantes son traviesos, curiosos y alcanzan a la olla caliente, agua hirviendo.

Así también las caídas como puede ser de la cama, de árboles, desde una ventana, de una bicicleta o patineta; la ingesta de sustancias desde medicina como paracetamol o algún producto de limpieza y hasta insecticida, explicó el Dr. Hidalgo.

“Lo que se debe hacer es prevenir. Sí vamos a ir de viaje, todos deben colocarse el cinturón de seguridad, si es a la playa poner bloqueador y sombrero al niño, si es un paseo al campo colocar repelente para la picadura de mosquitos. Vigilar al menor con frecuencia. Ellos son curiosos por naturaleza. Tenemos que estar pendientes de ellos. Actualmente, el papá está distraído con el celular mientras el niño se está metiendo un frijolito, una pieza del lego y ello provoca un atragantamiento”, advirtió.

El Dr. Hidalgo señaló que los padres deben llevar de urgencia a los niños ante alguna eventualidad para que sean evaluados y no dejar pasar el tiempo porque está de por medio la vida del menor.

“Por ejemplo, si un bebé o un niño se ha caído de una cama o de una altura considerable los padres deben estar atentos ante los signos de alarma si hay vómitos, pérdida de conocimiento o convulsiones, deben traerlo de emergencia y así no presente algún síntoma el infante debe ser evaluado”, puntualizó.

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