Durante el examen de admisión a la l, que se dio el día de ayer, se detectó la presencia de algunos universitarios que suplantaron la identidad de varios postulantes.

Estos siete estudiantes formaban parte de una banda delincuencial que usurpaba las identidades de los jóvenes que iban a postular a dicha casa de estudios o a otras universidades. Los pagos que les realizaban los postulantes eran de 2000 a 5000 dólares de acuerdo a facultad a la que iban.

Su 'modus operandi' consistía en clonar las huellas dactilares de los postulantes a los que iban a reemplazar en el examen y así poder ingresar por ellos. Se les incautó huellas dactilares de silicona moldeadas de los postulantes a suplantar -y que estaban insertadas en el los dedos de los suplantadores - burlando así el control biométrico.

Los integrantes de esta presunta organización delictiva fueron capturados y llevados en un bus a la sede de la  donde permanecerán hasta que concluyan las investigaciones. Los intervenidos podrían ser denunciados por el delito de falsedad genérica en la modalidad de fraude.