Amparo Erika Yanqque Huamaní, de 43 años, falleció el, último lunes en la noche, luego de caer en un ladrillo, tras recoger unos baldes de agua del camión abastecedor cisterna, a raíz de la rotura de una tubería de desagüe en, San Juan de Lurigancho.
Según detalló su hija, Erika Espinoza, su madre iba acompañada de su pequeño hermano de 6 años y cargaba en cada mano dos baldes, de unos 18 litros.
"Mi mamá no quiso hacer un paro y los cargo sin descanso hasta en el pasaje que da a mi casa. Fue en ese lugar cuando deja el agua en el suelo y tambalea y se golpea la cabeza contra un ladrillo sobresaliente", contó.
La mujer fue auxiliada por los vecinos y trasladada a un hospital de la zona, hasta donde llegó sin vida.
La víctima deja en orfandad tres pequeños y llevaba 25 años de casada con Amilcar Espinoza Salas. Sus vecinos lo recuerdan con mucho cariño y contaron que era una madre ejemplar.
"Por esa bendita agua dejó de existir. Por traer un par de baldes para poder dar de comer a mis hijos. Una desgracia que ha pasado. La vida de una persona no me la va a devolver", señaló el viudo.
Para la realización del sepelio, la familia cubrió los gastos con colectas de los vecinos y también se encuentra endeuda con 3 mil soles.