Moquegua: Advierten que derrumbe catastrófico cerraría otra vez Interoceánica
Moquegua: Advierten que derrumbe catastrófico cerraría otra vez Interoceánica

La ruta que une a Tacna y Moquegua con la región altiplánica de Puno, nuevamente podría quedar cerrada y hasta podría cobrar víctimas debido a que ocurrirá un derrumbe de grandes proporciones en el kilómetro 22+500 de la carretera Interoceánica, en el sector de Tumilaca. Así lo señala el informe preliminar de la empresa Geotecnia S.A.C, que encargó la Concesionaria Vial del Sur (Covisur).

Desde el 7 de diciembre pasado ocurrieron constantes deslizamientos de rocas y tierra. En dos oportunidades el tránsito estuvo restringido por completo. Ello ocasionó que cientos de pasajeros, así como trabajadores de Torata y Cuajone queden varados. También detuvo el tránsito de los vehículos de carga pesada que transportan aceite de soya y harina de Bolivia hacia los puertos de Matarani e Ilo.

Autoridades y agricultores se reunieron ayer primero en la zona del derrumbe y luego en el centro de salud El Molino. Allí fue entregado el informe técnico de Covisur, por su representante Noely Paca Rodríguez al alcalde de Moquegua, Hugo Quispe Mamani.

El estudio recomienda el cierre de total de la vía por peligro inminente. La habilitación de la carretera Los Ángeles a Yacango para las unidades medianas y en el caso de vehículos grandes y pesados, la ruta de Arequipa a Puno.

Se descubrió que la corona (parte más alta) del talud está cediendo.

El 10 de enero pasado se detectó un descenso de 5 metros en el talud y el 15 de enero pasado, 10 metros.

La causa de este fenómeno se creyó obedecía a una falla geológica; sin embargo fue descartado por los expertos, quienes concluyeron que el fenómeno fue ocasionado por las filtraciones de agua provenientes de un canal de regadío que pasa por la cima del cerro.

Es así que unos 30 a 60 metros del cerro han terminado comprometidos con fracturas y rajaduras. En tanto unos 150 metros de la carretera están en riesgo de terminar enterrados.

“Ya ocurrieron dos derrumbes considerables, se nos viene un tercero que puede hacer colapsar hasta el mismo puente Tumilaca”, comentó Paca Rodríguez en la reunión.

Como medida urgente, recomendó a los agricultores que ya no sigan regando en la cima del cerro, porque ello hace que los deslizamientos de piedras no se detengan.

La supervisora de Covisur, precisó que se podría habilitar una vía de emergencia en el borde externo de la zona del derrumbe; pero ello significaría ingresar unos 4 metros en una vivienda, ubicada al frente del talud.

Hoy llegarán especialistas de Covisur para realizar un estudio más profundo por 25 días. Los trabajos de recuperación de la vía, podrían tomar más de dos meses.

El alcalde Quispe Mamani se mostró a favor de una solución integral, que mantiene en vilo a los transportistas.

Dijo que si los agricultores aceptan entregar temporalmente parte de sus predios, ya no sería necesario el cierre total. Por ello les rogó su colaboración. “Estamos dispuestos apoyarlos; pero ellos también deben hacerlo con nosotros”, manifestó.

Añadió que solicitó a la empresa Southern Peru un geólogo para corroborar el informe de Covisur.

Por su parte los agricultores dijeron estar a favor de dejar de regar sus cultivos; pero pidieron tuberías para encapsular el agua del canal de regadío hacia el sector de Chibaya.

El delegado de los campesinos, Gramaniel Centeno Cuayla, explicó que el derrumbe perjudica el riego de cultivos en el mencionado sector.

“Anteriormente recibíamos 50 litros por segundo y ahora solo nos llega una cuarta parte de esa agua”, indicó.

Unos 20 agricultores y moradores resultan afectados, por la falta de agua.

En tanto una familia, se mostró en contra de ceder parte de sus predios para el paso provisional de los vehículos.

El paso por dicho tramo de la carretera Interoceánica se mantiene parcialmente cerrado. Solo un carril funciona.

Dos vigías se ubican en los extremos de la zona del derrumbe y por turnos las unidades pasan el tramo peligroso.

En cualquier momento podría ocurrir una tragedia.

La empresa CASA, que presta servicios a Covisur, desplegó una excavadora y dos volquetes, que están permanentemente en el lugar.

Intentan limpiar la vía; pero su trabajo es en vano, los derrumbes no paran. Ojalá puedan evitarse y la próxima vez no tengamos que contarles una tragedia.