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De Ripley es lo que pasó con la denominada “Alameda de la avenida Mártires de Uchuraccay, en pleno mercado de Piura, que se licitó, adjudicó y ejecutó sin contar con el expediente técnico respectivo, según concluye la oficina de Infraestructura de la Municipalidad Provincial de Piura (MPP). 

PARA COLMO. Como ya había ocurrido en otros casos, el gobierno obrista de la exalcaldesa Ruby Rodríguez realizó el proceso como un mantenimiento, a pesar de tratarse de una obra nueva, adjudicada en 818 mil 297.96 soles, advierte el jefe de Infraestructura de la actual gestión municipal, Rolando Pasache Araujo. 

Según se puede verificar en el portal del Sistema Electrónico de Contrataciones del Estado (Seace), la buena pro se entregó al Consorcio Libertad, integrado por las empresas: Constructora e Inmobiliaria Coarca S.A.C. y Silva Rodríguez Marco Antonio el pasado 17 de octubre de 2014. 

Este consorcio realizó los trabajos de “mantenimiento de veredas de la avenida Mártires de Uchuraccay entre las avenida Sánchez Cerro y Sullana”. 

Al revisar el contrato suscrito entre la municipalidad de Piura y el Consorcio Libertad, figura como representante de la entidad el jefe de la Oficina de Logística, Mario Renso Ato Morales y el representante del contratista, Marco Silva Rodríguez. 

SE CONFIRMA. Correo conversó con el actual jefe de Infraestructura de la MPP, Rolando Pasache, quien señaló que al interior de la municipalidad no figura el expediente técnico. 

“He solicitado si se ha hecho alguna contrata para la elaboración del expediente técnico en forma externa en la División de Estudios, y no existe ningún documento al respecto. Tampoco hay una orden de que se haya ejecutado por administración directa. En la División de Obras no hay ningún reporte de ingreso de expediente técnico ni del acta de entrega para el contratista”, explica el funcionario municipal.

OJITO. Es decir, los trabajos se llevaron a cabo a ojo de buen cubero y no siguiendo lo establecido en un expediente técnico, que es el conjunto de documentos de carácter técnico y/o económico que permiten la adecuada ejecución de una obra.

Por ejemplo, un expediente técnico contempla: Memoria descriptiva; especificaciones técnicas; planos de ejecución de obra; metrados; presupuesto de obra; valor referencial; fecha del presupuesto; análisis de precios; calendario de avance de obra valorizado; formulas polinómicas y en caso lo requiera: Estudio de suelos; Estudio geológico; Impacto ambiental, entre otros complementarios.

“La falta de un expediente técnico resulta grave, porque no se ha seguido el procedimiento legal para una obra, un expediente técnico es el documento formal en el cual uno paga. ¿Cómo sabes cuánto vas a pagar si no has hecho unos metrados, presupuesto, unos planos, no sabemos nada al respecto, es como decir, hablando chabacamente: a ver maestro te contrato para que me hagas el cerco de mi casa, pero él te pregunta cuál quieres, y tú le dices cualquiera, te doy cien soles”, advierte. 

Y FALTA MÁS. Además, tampoco se encontró el Cuaderno de Obra, no obstante, entre la documentación presentada por el contratista para la cancelación total de los trabajos se halló algunas de las hojas de este cuaderno. 

En ellas se revela que el Supervisor renunció el 12 de diciembre, toda vez que los trabajos avanzaban pero él no recibía el expediente técnico. 

En las copias del Cuaderno de Obra, que envía el contratista para solicitar el pago por el completo de la obra, porque supuestamente ya la terminó, anexa unas hojas del Cuaderno de Obra, que tampoco tenemos, pero el mismo anexa y en los asientos se consigna que el Supervisor de esta obra renuncia el 12 de diciembre alegando de que a la fecha la obra avanza, avanza y no se alcanza el expediente técnico. Ya con eso de la renuncia del Supervisor yo concluyo que definitivamente no ha existido un expediente técnico”, sostiene Rolando Pasache. 

LA CEREZA. El jefe de la Oficina de Infraestructura también reprocha que los trabajos se hayan licitado como un mantenimiento, cuando en realidad se trataba de una obra. “Aludieron de que era un mantenimiento no una obra, así que ya desde ahí arranca la primera falta, porque un mantenimiento es una intervención que se hace sobre algo ya construido, que no es el caso, y por la cantidad (el presupuesto) son más de 818 mil soles”, subraya.