El defensor del Pueblo, Walter Gutiérrez, visitó los refugios de Narihualá y Santa Rosa, en la ciudad de Piura, para comprobar el estado de los cerca de 1,000 damnificados, así como la entrega de ayuda humanitaria por parte de las autoridades locales y nacionales.
Durante su visita, Gutiérrez Camacho identificó tres aspectos principales que requieren urgente atención: “En una primera etapa, la Defensoría del Pueblo priorizará las gestiones relacionadas al suministro de agua, salud y educación en el total de refugios de la región”.
En este sentido, advirtió que aún es insuficiente la cantidad y calidad de agua que los damnificados tienen disponible.
Resaltó, además, la necesidad de una oportuna atención médica a niños, niñas, adolescentes y personas de la tercera edad; así como de poner énfasis en la gestión de residuos sólidos, los cuales continúan acumulándose en los alrededores de los lugares visitados.
En ambos refugios se entrevistó con los líderes y autoridades locales, quienes le transmitieron su preocupación por los cobros del servicio de electricidad con el que no cuentan desde hace 15 días; así como por la posesión de las tierras que actualmente ocupan.
Durante la tarde, el defensor del Pueblo se reunió con las principales autoridades de Piura con quienes se comprometió a seguir de cerca las acciones para la atención de damnificados y la reconstrucción de Piura.
En esta reunión estuvieron presentes el gobernador regional de Piura, Reynaldo Hilbik; el director regional de Salud, César Morón; el director regional de Educación, Pedro Periche; y el alcalde distrital de Catacaos; Juan Francisco Cieza.