Un grupo de vecinos de la urbanización Los Ficus, en Piura, denunció que un restaurante a diario genera escándalos y pone en peligro la salud e integridad de las personas, por lo que exigen cerrar el establecimiento.
Los moradores señalan que estos actos empiezan desde la mañana hasta altas horas de la noche, generando zozobra entre los vecinos, quienes tienen que lidiar con el volumen alto de la música, personas ebrias que salen a miccionar a la calle y, algunas veces, los enfrentamientos que se generan entre ellos mismos.
Cansados de estos hechos, ayer los vecinos y el teniente gobernador Saúl Pacherres se reunieron con la propietaria del restaurante La Conchita del Sabor, a quien le hicieron firmar un acta de compromiso a fin de que cumpla con el pedido y evitar los escándalos, sobre todo por la propagación del COVID-19.
Al respecto, Miguel Ángel Salazar, vecino de la zona, informó que la propietaria del negocio, Danny Vásquez, se comprometió en subsanar estas observaciones, dando un plazo hasta fin de mes de noviembre, de lo contrario exigirán el cierre definitivo del restaurante.
Entre los acuerdos a cumplir, según el acta, detalla que se evitará el mal estacionamiento de los vehículos, cumplir con el horario de atención, evitar que los clientes utilicen la calle como baños públicos y reducir el volumen de la música.