La Policía Nacional advirtió acerca de las graves consecuencias de la simple manipulación de artefactos pirotécnicos en las fiestas Navidad y Año Nuevo.
El último fin de semana intervinieron una vivienda donde hallaron 166 cajas de artefactos explosivos de diversas marcas. Fueron contabilizados más de 1600 bombardas, cohetes, explosivos pequeños y otros, los cuales fueron incautados.
El general Roger Tello, jefe de la Región Policial Puno, señaló que continuarán con los operativos. Luego de ello la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX) Juliaca, realizó una demostración de la ferocidad explosiva que puede significar uno de estos artefactos.
Señaló que un cohetillo, por ejemplo, tiene una mecha muy pequeña que al ser encendida no le da tiempo al manipulador, a que se retire del lugar. En muchos casos como se vio ayer, la detonación es en la mano. El resultado puede ser fatal. Puede perder la mano o los dedos.
Sin embargo, el operativo policial es mínimo en relación a la venta de estos materiales en los principales mercados de la ciudad. Su procedencia explicó, el general Roger Tello, es esencialmente de Bolivia. Muchos de estos incluso tienen el supuesto permiso de SUCAMEC, pero esas licencias son falsas.
A pesar del estado de emergencia no pueden intervenir en los centros comerciales como Tupac Amaru y San José.
Este año por primera vez en la ciudad de Juliaca 12 fabricantes autorizados realizarán una feria denominada “I Feria Pirotécnica Fuegos Artificiales Autorizados”.
Estarán ubicados en la Plaza 2 de Mayo de Juliaca. Los artefactos que venden son solo de uso recreativo.