Mercados serían los principales focos de infección de COVID-19 en la región de Puno

En los últimos días, las brigadas de atención COVID-19 de las diferentes Redes de Salud de la región Puno, tras realizar pruebas rápidas a comerciantes de los principales centros de abastos de las capitales de provincias, han detectado a portadores del SARS-CoV-2.

Al respecto, el decano de Colegio de Médicos de la región altiplánica, Vidmard Mengoa Herrera, indicó que la posición de la institución que él preside es que los martes, jueves y sábados,sean los únicos días que las personas salgan a los mercados.

Según Mengoa Herrera, en el resto de días debe regir el toque de queda.

Refirió que en la ciudad de Juliaca, las autoridades civiles, militares y policiales han perdido la autoridad; puesto que, en los mercados y arterias hay una aglomeración total. “Para la gente ahí no ha pasado nada. No solo se vende productos autorizados”, enfatizó.

Por otro lado, el representante de los médicos en la región, dijo que las autoridades locales deben habilitar más mercados descentralizados, con amplios horarios y con todas las medidas de seguridad.

Manifestó que los ofertantes deberían de ser autorizados con un carnet sanitario. Además, los mayores de 60 años ya no deben acudir a los mercados.

Estimó que el Estado de Emergencia no terminaría el 30 de junio.

Señaló que están haciendo esfuerzos en capacitar a los agremiados para detectar a pacientes con la COVID-19.

Luego de que se detectará a siete comerciantes contaminados del mercado Unión y Dignidad de Puno, la comuna anunció que dicho centro de abastos no atenderá por dos días. Un grupo de comerciantes de carne de cerdo mostró su malestar. Dijeron que los contagiados son las que cotidianamente viajan a otras regiones.

Widmard Mengoa dejó entrever que con el funcionamiento del laboratorio molecular se sabrá la situación real de infectados con el coronavirus en la región. Llamó a los puneños a no confiarse con los beneficios altura.

De otro lado, el decano reveló que las autoridades aún no han dotado de suficientes Equipos de Protección Personal (EPP) a los médicos que hacen frente a la pandemia.