El escritor no nació en Puno, pero prefirió quedarse en el altiplano.
El escritor no nació en Puno, pero prefirió quedarse en el altiplano.

Con presencia de amigos, familiares y colegas, este sábado fue el último adiós del escritor Feliciano Padilla, cariñosamente conocido como “Chano Padilla”, quien falleció el pasado viernes en la ciudad de Puno.

Sus restos mortales fueron llevados hasta el cementerio central del barrio Laycacota, en donde se le hizo un póstumo homenaje.

La muerte del también catedrático de la Universidad Nacional del Altiplano (UNA) fue motivo de lamentos en las redes sociales, en donde sus estudiantes y amigos, le dedicaron sentidas condolencias a los deudos.

Padilla Chalco nació en Abancay en 1944, y luego de residir en diferentes ciudades del país se instaló en Puno, donde por muchos años ejerció la docencia universitaria, hasta ocupar importantes cargos académicos y en la administración pública.

“Fue autor de la celebrada novela Aquí están los Montesinos, reeditada en varias oportunidades, y de varios volúmenes de cuentos que lo llevaron a obtener importantes premios literarios y a ser considerado en las principales antologías sobre narrativa peruana. Publicó también las novelas Ezequiel, el profeta que encendió la pradera (2014), y El morral escarlata (2021)”, escribió Alfredo Herrera Flores.

Algunos de sus relatos se encuentran recogidos en los libros Amarillito amarillando, Pescador de luceros, Cuentos de otoño y La bahía.

Asimismo, ha publicado ensayos y estudios sobre literatura puneña, un libro de poesía en quechua y español y varias letras para canciones populares.

“Adiós mi amigo Feliciano Padilla, gracias por tu amistad, solidaridad y valoración que tuviste siempre conmigo, desde los primeros días que llegué a la UNA Puno. Gracias por tu ánimo y respaldo en los momentos más difíciles de mi vida, ocupas un lugar importante en mi memoria personal, literaria, académica y política. Trazaste con humildad y puneñismo una ruta para la literatura y cultura puneña que proseguiremos. Es un compromiso en este momento de tristeza por tu ausencia”, escribió otro de sus amigos, Bladimiro Centeno Herrera.