Un lamentable deceso se registró en plena inmovilización obligatoria cuando un poblador del distrito Alto de la Alianza, en Tacna, era trasladado a emergencia del hospital Hipólito Unaune luego que se quejara de un decaimiento en su salud cuando se encontraba en su vivienda en compañía de sus familiares.
Por tratarse de una muerte fortuita de una persona adulta mayor y con antecedentes de diabetes, según versión de los familiares, se inició el protocolo COVID. Los paramédicos antes de retirarse rociaron el cadáver con alcohol.
PROTOCOLO
A las 13:30 h llegó el médico legista del Ministerio Público y al no encontrar ninguna lesión traumática o signo de violencia, se informó al Comando COVID-19 para catalogarlo como una muerte sospechosa de coronavirus.
Las hijas del fallecido expresaron su dolor y aseguran que habría muerto de infarto. No creen que haya fallecido de COVID-19 porque se sintió mal de salud hace unos días y de estar contagiado no se habría recuperado.
Pobladores de la avenida Internacional y la calle Carlos Wiesse lamentaron la demora de la Fiscalía y el personal de la Dirección de Salud para proceder con el levantamiento del cadáver que hasta las 15 h permanecía en la avenida Internacional, cerca a la calle Carlos Wiese.