la subgerencia de comercialización de la Municipalidad Provincial de Tacna y los comerciantes del mercado mayorista Miguel Grau llegaron  a un acuerdo para mejorar las condiciones del servicio que brindan para reducir los riesgos de contagio del COVID-19.

Las medidas se adoptan luego que el Ministerio de Salud lo incluyera dentro de los 380 centros de abastos del país considerados de alto riesgo de contagio por la aglomeración de personas y dispusiera que sea inspeccionado el 16 de mayo.

El subgerente de comercialización, Jhon Pilco Calizaya, indicó que entre las medidas esta que los 1,680 comerciantes mantengan sus productos dentro de sus puestos al interior del mercado y coloquen plásticos encima de ellos para que los compradores no los toquen y los pasadizos estén libres para el tránsito.

Además, en la zona de plataforma debe haber una distancia de dos metros entre cada puesto instalado, igual será el espacio entre los camiones de los agricultores que se instalen, en ambos casos deben también contar con plásticos encima de sus productos.

También se ubicará cintas para un distanciamiento de un metro para que los compradores no tengan contacto con los comerciantes.

Para los 300 carreteros que laboran en el Grau se dispuso que utilicen los chalecos antiguos al estar numerados, no permitirán desde hoy el ingreso de los informales

“El miércoles vamos hacer una inspección para ver el cumplimiento de las medidas”, comentó.

La administradora del mercado, María Pari Maquera, agregó que en las dos puertas de acceso se colocará alcohol en gel para las personas que ingresen y cada comerciante en su puesto también lo habilitará para desinfectar a las personas que les compren.

El mercado tiene 2,500 comerciantes quienes alegan que se han mejorado las medidas de seguridad y controlado el aforo de personas por lo que consideran que no debería ser intervenido. 

Entre las medidas de seguridad ya establecidas están el uso obligatorio de guantes, mascarillas, lentes y gorras de protección para el ingreso al mercado de los comerciantes. Mientras que las personas que acudan a realizar sus compras deben ir con guantes y mascarilla. 

En el centro de abastos se reportó un caso de contagio de COVID-19 en abril pasado tras la toma de muestra a cien comerciantes, luego de pasar la cuarentena de 14 días se reintegró el 1 de mayo al contar con los certificados de salud que acreditan que no tiene el virus.