GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3
GF Default - Imported ANS Video id=8fad72e5-655c-428e-943a-9ce73bbf09d3

Preocupados se mostraron los comerciantes que se instalan en la feria del Cerro Intiorko ya que las ventas y visita de personas a la capilla, comparado a años anteriores, disminuyó en el primer día feriado por Semana Santa.

Esto se debería a la decisión de la Diócesis de Tacna y Moquegua de prohibir las actividades religiosas en la capilla, donde se ubicaba la cruz del Cerro Intiorko, por no guardar el sentido de los actos de Semana Santa.

Para llegar a la cima del Cerro Intiorko se puede abordar buses en la salida a Tarata. Las unidades por un costo de S/ 1 trasladan en diez minutos a los pasajeros a su destino. Otra forma de llegar es por el camino empedrado, en el distrito Alto de la Alianza, y el tiempo que demora es 30 minutos.

Desde el martes 22 de marzo más de un centenar de personas empezó a montar sus negocios para tenerlo listo ayer, pero a pesar de ello no había mucha presencia de peregrinos en el Cerro Intiorko.

La comerciante Belinda Quispe informó que el año pasado invirtió S/ 500 y solo percibió S/ 300 de las ventas, y a pesar que ayer había poco público, confiaba en que la situación mejore hoy y el fin de semana.

En otra zona, cerca de 400 comerciantes vendían productos traídos de Puno, entre tubérculos, hortalizas, frutas y trucha.

Ellos también se quejaron que las ventas habían disminuido en los últimos dos años, pese a que sus productos los venden por debajo del precio en el mercado Grau.

El yatiri y miembro de la Asociación San Bartolomé de Puno, Felipe Charca, dijo que en los quince años que viene a trabajar en el Cerro Intiorko ha notado una disminución de las personas que van al lugar.

Dijo que esto se debería a las medidas de seguridad que adopta la Policía y personal de serenazgo que asusta a las personas a pensar que el lugar es inseguro. El yatiri cobra por sus servicios entre S/ 3 y S/ 5. Son cerca de una treintena de personas que laboran como yatiris de manera ambulatoria. El mismo reclamo efectuaron la veintena de curanderos y los cerca a de treinta vendedores de alasitas.

Lo malo de la feria es la cercanía de los puestos de venta de comida a las granjas porcinas del lugar y la basura acumulada que puede generar focos de contaminación.

Toda la feria se ubica a unos 500 metros de la capillla del Cerro Intiorko la cual luce algo descuidada y solo unos cuántos devotos acuden a visitarla pese a ser retirada la cruz por la Diócesis de Tacna y Moquegua. Los pocos devotos que acudieron ayer en la mañana dejaron velas y oraron. En el interior habían tres cruces de los alferados.

Para Elías Paco, quien sube junto a su familia al Cerro Intiorko para venerar la cruz y visitar la feria, lamentó que la festividad fuera prohibida por la iglesia e indicó que las personas esperan recibir la bendición del obispo cuando acuda a la capilla.