Comisario de Aguas Verdes es intervenido en fiesta

Escrito por Luigi Vignolo

En una aparente fiesta en compañía de un grupo de amigos, así fue encontrado el comisario de Aguas Verdes, mayor PNP Mario Bonilla Bello, en pleno toque de queda.

Durante la intervención, Bonilla se escondió en la cocina del inmueble de la urbanización Tomás Arizola, lugar donde sucedieron los hechos.

Diario Correo accedió al parte policial en el que se detalla que el propio comisario de Aguas Verdes, distrito donde hay un elevado número de casos de COVID-19, se encontraría inmerso en el delito contra la administración pública y violación de las medidas sanitarias en agravio del Estado peruano.

DE FIESTA

El último sábado, personal que custodia la zona de frontera con Ecuador, divisó a cinco personas cargando una caja de cerveza por las calles de la urbanización Tomás Arizola, en Aguas Verdes.

De inmediato, agentes de la Policía, en compañía del alferes de Fragata Yassir Palacios Quiñonez ubicaron un domicilio de donde se escuchaba música a todo volumen y voces de un grupo de personas que al parecer realizaban una reunión.

“Al tocar la puerta se demoraron en abrir la misma, en ese transcurso apagaron la música y se escucharon sonidos de botellas”, se lee en el parte.

Posterior a esto, una fémina abrió la puerta y autorizó el ingreso. La mujer dijo que se encontraban celebrando un cumpleaños. Grande fue la sorpresa cuando en el interior del domicilio se reconoció al comisario de Aguas Verdes, escondido en el área de cocina con aliento a alcohol, (según el documento).

En la vivienda también se encontró a un joven, así como a las ciudadanas venezolanas Gisellis Betanceourl Matos de 20 años de edad, Estéfany Sosa Peña (18) y Roxana Matos Cortez (34).

Al cierre de la edición, se difundió el certificado de dosaje etílico, el cual resultó negativo para el comisario de Aguas Verdes.