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De 5,735 personas con discapacidad en el departamento de Tumbes, el 77% no accede a ningún servicio educativo; además, el 51,2% del total de mujeres con habilidades especiales son analfabetas.
Por tal motivo, la Oficina Defensorial advirtió que el 100% de las instituciones educativas básicas regulares no cuenta con intérpretes en lenguaje de señas, ni especialista en sistema braille para atender a estudiantes con discapacidad auditiva y visual.
SUPERVISIÓN
El ente defensorial intervino ocho colegios públicos y privados, en los niveles de primaria y secundaria, detectando que incumplen con los parámetros para brindar un buen servicio educativo inclusivo de calidad, debido a que no cuentan con los profesionales de salud, ni la infraestructura adecuada.Esto genera que los estudiantes con habilidades especiales no se desarrollen en óptimas condiciones, pese a que es un derecho que les asiste el Estado peruano.
Por ende, según la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad establece que el Estado debe asegurar un sistema de educación inclusiva en todos los niveles, orientado al pleno desarrollo y el respeto por la diversidad.
Agregando que toda persona tiene derecho a recibir una educación de calidad en todas las etapas del sistema estudiantil sin discriminación alguna.
En la región Tumbes, el 51,2% de mujeres con discapacidad se encuentran en condición de analfabetismo, con relación al de los hombres que registra el 49.8%.
Ahora, para la atención de los 1,331 alumnos con discapacidad, se cuentan con 7 equipos de Servicio de Apoyo y Asesoramiento para la Atención de las Necesidades Educativas Especiales (Saanee) distribuidas en la región Tumbes.
Estos grupos se conforman por 36 profesionales, quienes todos son docentes.
Sin embargo, para la provincia de Zarumilla, solamente se cuenta con un 1 equipo Saanee conformado por dos especialistas para atender 31 colegios del nivel primario y 16 del secundario.
En tanto, en Contralmirante Villar hay 1 grupo que tiene 2 expertos para trabajar con 36 instituciones educativas básicas regulares del nivel primario y 16 para secundario.
CAUSAS
El jefe de la Oficina Defensorial de Tumbes, Abel Chiroque Becerra, indicó que el amplio porcentaje que no accede al servicio educativo regular es por temor a ser discriminados."Los mismos padres temen que sus hijos sufran por un maltrato físico o psicológico por parte de sus compañeros", dijo.
También se refirió a que los mismos directores no permiten la matrícula de los estudiantes con discapacidad y, mayormente, recomiendan a los padres que éstos asistan a clases en los Centros de Educación Básica Especial (Cebe).
Pues bien, Chiroque Becerra agregó que los mismos directores malinterpretan la norma emitida por el Ministerio de Educación (Minedu) porque se ha establecido dos vacantes por salón.
"Los colegios regulares permiten dos vacantes por grado, cuando el Minedu exige que sean dos por salón. Luego dicen que no se pueden matricular", precisó.
No obstante, el problema de fondo es que no existen los especialistas apropiados para brindar el servicio educativo idóneo; por tal motivo, los mismos padres de familia matriculan a sus hijos en los Cebe pese a que aún existen ciertas deficiencias.
"Por un tema de cercanía y buen trato, los matriculan en el Cebe", comentó.
RESULTADOS
Luego de que la Oficina Defensorial de Tumbes supervisara ocho colegios, siendo 6 públicos y dos privados, ninguno recibió materiales específicos para estudiantes con habilidades especiales, por tanto, no estaban en la capacidad de atender a la población que tiene discapacidad auditiva, visual, trastorno espectro autista (TEA).Los cuales, ninguno cuenta con un intérprete en lengua de señas ni especialista en sistema braille para enseñar a los alumnos que tienen discapacidad auditiva y visual.
De igual manera, como ocurre en la mayoría de locales educativos, cuatro de los supervisados no han mejorado la accesibilidad en las puertas de ingreso, impidiendo que un alumno no pueda desplazarse en silla de ruedas con facilidad.
Pero, lo lamentable es que el 80% no cuenta con personal docente que haya estudiado educación especial ni inclusiva.
Además, aseguran que el 60% recibe capacitaciones por parte del Ministerio de Educación (Minedu), aunque resulta insuficiente para ofrecer una buena sesión de clase a los alumnos.
